El Valencia derrotó por 3-1 al Deportivo Alavés en Mestalla en un partido muy completo de los hombres de Marcelino. Tanto es así que la afición se rindió ante el juego de su equipo y les terminó por ovacionar y hacer la ola.

Valencia respira festividad en estas fechas y los jugadores se vieron imbuidos por el ambiente. La primera mitad fue una oda al juego ofensivo por parte del conjunto Che y solo un espectacular Fernando Pacheco impidió que los locales se fueran con un resultado de escándalo al descanso.

Los jugadores mostraron su mejor versión, y cuando todos están tan enchufados, el rival lo tiene muy difícil. El primer gol fue buena muestra de ello. Una acción muy coral que comenzó en los pies de Montoya, se la entregó a Parejo, combinó con Rodrigo en la frontal del área y, casi sin espacio, realizó una pared con Simone Zaza y definió con un toque sutil ante la salida de Pacheco.

El Valencia seguía a lo suyo y los de Abelardo no sabían cómo parar el vendaval ofensivo. Guedes desbordaba por su banda, Gayá le dobló constantemente generando superioridad por la banda de Martín, Parejo y Kondogbia dominaron el medio y los delanteros realizaron ese trabajo incansable que les caracteriza.

Rodrigo fue autor del primer tanto del encuentro | Fotografía: Valencia CF
Rodrigo fue autor del primer tanto del encuentro | Fotografía: La Liga

La segunda mitad fue una historia completamente distinta. El error casi al principio de Gayá que aprovechó Martín para regalarle el gol a Sobrino fue el toque de atención necesario para que el equipo no se relajase. Así, al poco de recibir el tanto visitante, Guedes advirtió y después Laguardia, en propia meta, sentenció.

Desde el 3-1 el Valencia cambió el registro. Se mostró como un equipo muy maduro que sabía que con la renta que tenía no era necesario volverse loco. El número de ocasiones descendió pero el propio desarrollo del encuentro ofreció al Valencia chances para hacer el cuarto.

También pudo encajar el segundo en algún error puntual, pero supo calmar el partido para que el Alavés no tuviese ni opción a recortar distancias.

El Valencia ha sumado 19 de los últimos 21 puntos y ha recuperado su mejor versión. Esa que a comienzo de temporada le hizo colocarse segundo a cuatro puntos del FC Barcelona y le permitió cosechar ocho victorias consecutivas.

El final de temporada se presenta muy emocionante para el conjunto Che. Un equipo que vuelve a funcionar como una máquina bien engrasada y que, con la Champions aparentemente asegurada, mira a cotas más altas, mira a ese podio en el que no se sube desde la temporada 2011/2012 y de reojo también, porqué no, al subcampeonato.