Solo un último paso alejaba al Castilla de ascender y ese era el partido de vuelta del playoff de ascenso y el rival, el Cádiz. Casualidades de la vida, el conjunto amarillo fue juez y parte del descenso consumado hace cinco años y el destino ha querido que los gaditanos asistieran en primera persona al regreso a la categoría de plata del filial madridista. Ante la dificultad evidente que tenía la empresa que el Cádiz tenía por delante, el equipo andaluz hizo un comienzo netamente ofensivo y a buscar pronto la machada.

Los de Toril tenían la lección aprendida y aguantaron el inicio de los gaditanos que buscaron la presión en todo el campo incomodando a la defensa blanca. La dureza con la que se emplearon los amarillos estaba en el guion y no asustó al filial madridista que aguantó los primeros diez minutos sabiendo que su momento llegaría. La presión del Cádiz permitía que los blancos pudieran salir con campo por delante una vez robaban el esférico. Mucho riesgo para los visitantes si enfrente tienes a un Jesé en estado de gracia.

Aunque el Cádiz comenzó buscando sus oportunidades, éstas no llegaron y fue el Castilla el que pegó primero con Jesé Rodríguez como protagonista. Un pase al hueco de Mandi permitió al canario gozar de la primera ocasión de peligro pero su disparo se marchó desviado. Solo fue un aviso, el preámbulo de lo que lograría minutos después vistiéndose de genio. Si ya certificó la clasificación de España sub 19 esta semana, en la mañana de hoy el mediapunta fue una pesadilla para la zaga cadista que estaba vendida por el planteamiento alocado de José Manuel González.

Jesé abrió el marcador

De este modo, Jesé Rodríguez peleó hasta el final un balón que acabó por robar. Su tenacidad tuvo el premio de encarar mano a mano a Aulestía y su calidad le permitió driblar al guardameta visitante marcando a placer. El 1-0 a los diez minutos cerraba la eliminatoria ante cualquier conato de remontada amarilla y ponía al filial en ventaja por 4-0. El Cádiz tenía mucho que remar y la empresa se antojaba como una quimera ante el vendaval en el que se convirtió el Real Madrid Castilla.

Jesé Rodríguez siguió demostrando su clase y repartió detalles a diestro y siniestro. Su encuentro estaba siendo para enmarcar con regates y pases buscando a Morata y Joselu. De esta manera pudieron ampliar más la renta, pero el segundo gol llegó tras una falta que botó con maestría Mosquera. Antes de eso, Joselu había errado un penalti que cometió la defensa cadista sobre Morata, pero el Castilla continuó con su plan y el segundo acabó por llegar.Al mediocentro gallego se le queda pequeña la categoría y lo demostró disparando a puerta una falta lejana que sorprendió al portero.  Un golazo que era la puntilla al Cádiz. Con 5-0 en el global de la eliminatoria, el Castilla se dirigía con paso firme a Segunda división de manera irremediable.

El descanso dio un respiro al Cádiz que era consciente de su destino pero que intentó proteger su honor ante la afición desplazada a la capital. El segundo tiempo fue mero trámite, a caballo entre la exhibición blanca, la fiesta madridista y la agonía cadista. Los amarillos apurarán sus opciones de ascenso reenganchándose al playoff por la parte más larga.  Los de Alberto Toril aprovecharon el segundo tiempo para deleitar a su público  y ampliaron aún más la renta de una eliminatoria que el Castilla hizo parecer fácil. Joselu tuvo tiempo para enmendar su error en la pena máxima y marcó su tercer tanto en la eliminatoria tras cruzar un balón.

El Cádiz fue superado por el filial madridista

Asimismo, el Cádiz siguió luchando de pie gracias al empuje de una grada cadista que mostró su ilusión y llevó en volandas al equipo en estos momentos complicados. De este modo, De Coz hizo el gol del honor visitante al que a continuación Mosquera invalidó aprovechando una salida en falso del portero Aulestía. Con diez minutos por delante, el Castilla demostró su hambre futbolística y siguió sitiando al Cádiz. Tras una contra llegó el quinto, obra de Morata.

Gran fiesta madridista en su Ciudad Deportiva que culmina un proyecto muy serio que se inició mediada la temporada pasada con la llegada de Alberto Toril al banquillo blanco. El Real Madrid Castilla venció al campeón de grupo 4 de Segunda División B con un global de 8-1 y se une al Mirandés en su aventura por la categoría de plata del fútbol español.