El Club Deportivo Tudelano sigue reforzando su plantilla y en esta ocasión lo hace en la delantera. Tras los fichajes de Víctor Bravo y David González, centrocampista y extremo, en esta ocasión ficha a un punta, pese a que tiene mucha movilidad. Aitor Pons, que terminó contrato el treinta de junio con la desaparecida Unión Deportiva Salamanca, firmará por la entidad navarra.

Será la segunda ocasión que el atacante esté en la Segunda División B, ya que al club charro llegó tras una magnífica temporada goleadora con el Montuiri, realizando 22 tantos. Previo a ello había pasado por Sporting Mahonés y SD Somozas en Tercera División, en los que cuajó muy buenas campañas y su progresión fue muy positiva. El fichaje es de presente y futuro, ya que solo tiene veintidós años.

En su última campaña no gozó apenas de oportunidades en la UDS. Solo ha logrado ser titular en cinco ocasiones, de las que terminó una el partido completo, habiendo participado en doce más y conformando un total de quinientos ochenta y siete minutos en este debut en la categoría de bronce del fútbol español.  Dos tantos han sido su balance de la campaña, aunque lo cierto es que ha dejado buenas sensaciones y ha aportado mucho esfuerzo físico.

Velocidad y resistencia son sus principales armas

El delantero es bueno en muchos aspectos, aunque no destaca especialmente en ninguno. Es alto y tiene buen salto, pero a la vez buen manejo de las piernas a la hora de sacar su buen disparo. Actúa en punta, pero tiene mucha movilidad y también se encuentra cómodo jugando junto a otro delantero, como demostró este año junto a Igor de Souza. El zurdo tiene una excelente resistencia y velocidad, aunque flojea a la hora de regatear o desbordar.

Esta campaña en el Tudelano será una nueva prueba de nivel en Segunda B, en la que tratará de hacerse hueco como titular habitual para poder asentarse en la categoría y continuar creciendo lejos de su tierra, las Islas Baleares.