El de Camas está preparado para afrontar una nueva temporada con el Real Madrid, en el que volverá a demostrar una campaña más el porqué es considerado como uno de los mejores defensas centrales del mundo.

Su adaptación a la posición de defensa central marcador le ha convertido en un seguro de vida formando pareja tanto con Pepe como con el jovencísimo Varane, si bien en las ocasiones en las que ha tenido que volver a ocupar su posición antigua como lateral diestro, ha cumplido con creces, rayando a una gran altura, si bien en el centro de la zaga, su seriedad, su sentido de la anticipación y sus incorporaciones al ataque partiendo desde la cueva y sorprendiendo a sus rivales son ya marca de la casa del universal jugador andaluz del Real Madrid CF.

La asunción de un rol como capitán, superior incluso al del propio Iker Casillas, otorgan unos galones al jugador ganados a pulso no sólo por su capacidad como futbolista, sino también por su capacidad de sacrificio y de autocrítica que le sitúan como ejemplo para el resto de compañeros de la plantilla, sobre todo para las nuevas incorporaciones.

El general Ramos presenta sus credenciales

La campaña pasada sin duda alguna fue la de la consagración de Sergio como líder dentro del vestuario merengue, sabiendo coger el mando del grupo en un momento complicado en el que la figura de Iker Casillas se encontraba seriamente tocada por el enfrentamiento directo con el técnico José Mourinho.

En los momentos más complicados y duros de la temporada, el de Camas fue el primero en dar un paso al frente y asumir su parte de culpa en una temporada aciaga para los intereses madridistas, que veían como el FC Barcelona recuperaba el trono perdido de la Liga, más por demérito propio que por un buen hacer de su eterno rival.

Por si fuera poco, tras la pésima imagen dada por los blancos en el encuentro de ida de las semifinales de la Champions ante el Borussia Dortmund, fue el primero en hacer autocrítica y elevar la moral de una tropa decaída, liderando el intento baldío de remontada que a punto estuvo de dar el campanazo y lograr un pase a la final que hubiese alcanzado unas connotaciones épicas.

En el plano futbolístico, su consolidación como central, tanto en su asociación con Pepe como con el jovencísimo Varane, ha sido espectacular, ganando el equipo en una seguridad y tranquilidad en la zaga digna del mejor Beckenbauer, haciendo mejores a sus compañeros en la retaguardia, con sus contínuas ayudas y su jerarquía.

Destacar además que a pesar de jugar en la retaguardia son frecuentes sus subidas al ataque, que en más de una ocasión le han reportado pingues beneficios al fútbol de ataque merengue.

Año nuevo, con Sergio Ramos + 10

La temporada entrante refrendará el status de Ramos como el mejor defensa del mundo, más asentado si cabe en su posición de zaguero, impartiendo en cada partido una lección magistral de saber estar, de posicionamiento, de anticipación y de contundencia, que servirán al joven Varane para seguir creciendo a su vera, formando una de las mejores parejas de centrales del planeta.

En el vestuario, es más que probable de que se convierta en el verdadero capitán moral del conjunto blanco, por encima incluso de un Casillas que habrá que ver si está recuperado del tormento moral que supuso la campaña anterior en la que el capitán apenas pudo disfrutar de minutos , sobre todo desde la llegada de Diego López en el mercado invernal.

Ancelotti deberá de estar tranquilo contando con el de Camas en el once inicial, siendo a priori uno de los pocos jugadores junto a CR7 que se han ganado un puesto fijo en el once inicial.