Tras desperdiciar un 3-0 en el partido de ida disputado en La Rosaleda, el Málaga CF no ha pasado del empate a uno en Navarra, por lo que los malagueños quedan apeados de la competición copera en estos dieciseisavos de final. El gol en propia puerta nada más comenzar el encuentro, significó un duró revés para los blanquiazules, que consiguieron levantarse e intentar darle la vuelta al marcador, pero un único gol de Eliseu no sería suficiente y Osasuna se ha convertido por el valor doble de los goles fuera de casa en equipo de octavos de final.

Inicio sin suerte

El partido no podía comenzar peor para el Málaga. En el segundo 33, cuando todavía mucho de los aficionados no se habían acomodado en los asientos del hoy milenario Sadar, llegaba el primer gol de los rojillos. Tanto en el que la suerte ha acompañado a los osasunistas, ya que un centro de Cejudo, tras tocar en Weligton se colocaba en la portería malacitana, sin que el guardameta camerunés, Kameni, pudiera hacer nada. 

Tras el gol, como era de esperar, Osasuna cedió la posesión del balón al Málaga y se dedicó a defender e intentar salir con velocidad al contraataque. Este dominio en la posesión de balón no terminaba de tener recompensa y el poco peligro malaguista llegaba a través de disparos desde fuera del área, como el de Sergi Darder, que lo intentaba desde lejos, pero su disparo se marchaba rozando el largero de la portería rojilla. 

Arreón malaguista

El partido no terminaba de coger vuelo y la posesión se equilibraba llegados los primeros veinte minutos. Esto cambiaría a partir del minuto treinta, en el que el Málaga volvía a meter una marcha más, logrando alcanzar algunas llegadas peligrosas y sobre todo provocar numerosos corners gracias a las incansables subidas de Jesús Gámez por banda derecha. Pero, al igual que sucedía tras el gol de Osasuna, este dominio también acababa sin ningun aspecto positivo para el Málaga. Así, con los malacitanos llevando la iniciativa del partido, pero sin terminar de rematar, se llegaba al descanso del encuentro. 

Dominio sin peligro de los de Schuster

La segunda mitad comenzaba de una manera muy parecida a como acabó la primera, con el Málaga encerrando a los de Javi Gracia en su propio campo, pero sin crear ningún peligro, debido a la poca creación que tiene el conjunto malacitano de tres cuartos de campo para delante. Este problema, que ha causado grandes estragos en el Málaga en lo que va de temporada, ha sido hoy una de las claves por la que el equipo dirigido por Bernd Schuster no ha logrado pasar por encima de Osasuna y alcanzar la siguiente ronda de la Copa de SM el Rey. Los minutos pasaban y el Málaga continuaba sin crear el gol que metiera el miedo en las piernas de los rojillos. 

Gol de Eliseu y último empuje sin recompensa

Por fin llegaba el tanto malagueño. Un centrado pero fuerte disparo de Eliseu desde la frontal del área, marca de la casa, ponía el empate en el marcador. A pesar del duro lanzamiento del portugués el meta osasunista, Riesgo, pudo hacer algo más para evitar el empate. A pesar de las tablas en el marcador, de nuevo el conjunto malagueño no terminaba de llegar con peligro. Esto se acentuó cuando Schuster buscando desesperadamente el gol en jugadas aisladas, retiraba del terreno de juego a Portillo y Pedro Morales, para dar entrada a Roque Santa Cruz y Duda. 

Osasuna, aunque pasaba la mayor parte de los minutos defendiendo su portería, de manera ejemplar eso sí, también se prodigó en algunas ocasiones en ataque. La más clara para los de Javi Gracia, llegaría en el minuto 25 de la segunda mitad, cuando Armenteros se plantaba solo en el área ante Kameni, pero una magnífica parada del hoy portero titular del Málaga, dejaba el 1-1 en el luminoso y las esperanzas malaguistas intactas. 

A medida que pasaban los minutos, Osasuna se encerraba cada vez más en su campo y daba el balón totalmente al equipo malacitano, que a pesar de tener a Duda y a un rematador como Roque Santa Cruz en el campo, no aprovechaba el juego por banda e intentaba ponerse por delante en el marcador con sucesivos disparos lejanos. Darder estuvo cerca de conseguirlo, pero una magnífica parada de Asier Riesgo, despúes de que el balón se envenenara tras tocar en Arribas, dejaba las tablas en el marcadaor. 

Ahora sí, cuando ya no había otra vía que colgar balones al área, los blanquiazules, comenzaron a meter balones a la cabeza de Santa Cruz y Weligton, que vivía estos últimos en el área de Osasuna. Pero finalmente, esto no sirivió para nada y el equipo malacitano se despide de la Copa de SM el Rey en esta primera ronda para los conjuntos de la Liga BBVA. Al quedar apeados de este torneo, a los pupilos de Schuster tan solo le queda centrarse en la Liga y salir de los puestos peligrosos en los que se encuentra actualmente. Por su parte, Osasuna, pasa a octavos de final, donde se enfrentará al vencedor de la eliminatoria que enfrenta a Real Madrid y Olimpíc de Xátiva, de la que probablemente salga vencedor el conjunto madrileño.