Tuvo muy buena entrada el Nuevo Estadio de La Victoria para recibir al CD Tenerife en esta calurosa tarde de domingo en Jaén. Los aficionados y jugadores llegaban al estadio a sabiendas de que el partido iba a tratarse de una final, como cada encuentro que le queda por disputar al conjunto de Manolo Herrero. Los insulares, en posiciones altas de la clasificación, llegaron a la capital andaluza con menos presión pero conscientes de que una victoria les dejaría con más opciones de luchar por el ascenso.

Reparto de juego en el primer tiempo

El Real Jaén salió con algunas dudas en defensa en los primeros compases de partido y el Tenerife intentó hacer daño bajo esta situación. Ayoze comenzó muy activo y fue un puñal por su banda. En el minuto 4,ya avisó con una gran jugada,pero envió a córner la defensa cuando el delantero estaba a punto de disparar. Esta fue la primera acción de peligro del pelotero tinerfeño que iba a tener muchas más a lo largo de la primera mitad. Aitor tuvo otra gran ocasión en los primeros compases pero René, muy seguro, mandó a córner. El equipo de Álvaro Cervera tuvo las ideas muy claras durante este periodo de partido. Presionó al Real Jaén, le robó la pelota en varias ocasiones y generó contragolpes que pusieron en aprietos a los andaluces.

Sin embargo, el Real Jaén también lo intentó. La ocasión más clara de los primeros 45 minutos para los locales vino a balón parado. Óscar Rico colgó un balón en al área, encontró rematador pero el esférico rebotó en el poste. Otro balón a la madera de Víctor Curto que suma unos cuántos en lo que llevamos de competición. El siguiente tramo de minutos estaría marcado por la sucesión de oportunidades creadas por ambos conjuntos. El Tenerife llegaba con más claridad y peligro por medio de Ayoze y Édgar mientras que el Jaén tuvo algún acercamiento clarísimo por parte de Jona que se encontró con un inspirado Diego Rivas.

El árbitro decretó posteriormente el final del primer asalto y ambos equipos se marcharon a vestuarios con el resultado gafas.Empezó el Tenerife presionando muy arriba y ahogando al Jaén en unos minutos en los que pudo transformar el electrónico. Una vez que esa presión se retrasó a campo propio, el Jaén comenzó a acercarse más a la meta de Diego Rivas pero sólo en dos ocasiones aisladas consiguieron crear peligro.

Tensión desbordada en la segunda parte

Con el comienzo de la segunda mitad, los jugadores locales salieron algo más volcados en ataque. La necesidad de conseguir los tres puntos se incrementaba al conocer los resultados de los equipos involucrados en zonas bajas de la clasificación y el Real Jaén debía imponerse al Tenerife para no hundirse. Manolo Herrero planteó una estrategia para no sufrir en defensa y poder aprovechar las oportunidades en ataque. Víctor Curto e Israel Jerez lo intentaron desde fuera del área pero sus disparos se marcharon desviados sobre la portería de Rivas. Los aficionados presentes en La Victoria convirtieron el estadio en una olla a presión y el Real Jaén notó el apoyo del 'jugador' número 12. Álvaro Cervera, dio entrada a Íñigo Ros y Chechu para tratar de dar más mordiente y refresco al ataque visitante. Precisamente, fue Chechu el jugador del Tenerife que más activo estuvo en estos compases. 

El técnico local también dio movimiento al banquillo y con la entrada de Fran Machado el Real Jaén dio un salto de calidad en el ataque. El granadino se internó con peligro en varias ocasiones en el área rival y puso en serios aprietos a Diego Rivas que resolvió con maestría, ofreciendo intervenciones de gran nivel en el día de su debut.

Cuando parecía que el partido iba a finalizar como comenzó y que el resultado no le serviría ni a unos ni a otros, Jozabed se internó en el área, cayó y el colegiado interpretó que fue empujado por Diego Rivas. Penalti, amarilla para el guardameta y un bálsamo de esperanza en las botas de Jona a 11 metros de la portería. La Victoria estaba en tensión esperando ansiosa a que el hispano-hondureño lanzara la pena máxima. El 9 del equipo blanco colocó el esférico sobre el punto fatídico, dio unos paso atrás, miró a Diego Rivas y tras el pitido colocó el balón en la escuadra derecha del portero. El bálsamo de esperanza se convirtió en un bálsamo de tranquilidad, al menos momentánea. La Victoria lo celebró como si de un ascenso se tratara y al minuto el árbitro dio por finalizado el encuentro. 

Con esta victoria, el conjunto jienense sale de puestos de descenso con 43 puntos y depende de sí mismo para salvar la categoría en las jornadas que restan. Los tinerfeños siguen en puestos que dan derecho a jugar el Play Off por el ascenso pero se distancian con los dos primeros clasificados