Se acabó la temporada regular en Segunda División B. El Tudelano llegaba a Huesca con su objetivo ya cumplido de la salvación y con ganas de jugar bien en uno de los mejores estadios del grupo. El Huesca, tras el varapalo sufrido la semana pasada con la derrota ante el Getafe B, y la ya imposible clasificación para los playoffs, quería despedirse de su afición, en el ya denominado fracaso de temporada.
La falta de intensidad pasa factura
El poco público del encuentro, como buen soberano, mostraba una sonora pitada a sus jugadores antes de dar comienzo el choque. El partido comenzaba con un 4-4-2, con 2 canteranos en el terreno de juego. Poco era lo que se veía, sin un dominador claro, pero con un Tudelano que parecía querer más en el cómputo global.
En el minuto 14 de la primera parte, era Guillem el que asustaba a los navarros mandando el balón al larguero tras un remate de cabeza. El balonazo no suponía un punto de inflexión para el Huesca, sino que era el Tudelano el que poco a poco se venía arriba. Los de Navarro seguían con indecisión y errores en el control del balón que hacía que el Tudelano adelantase sus filas.
En el minuto 36 llegaba el gol del Tudelano, obra de Esparza. El tanto suponía la pitada del poco público presente y los jugadores del Huesca reclamaban al árbitro, rodeándolo, que el gol había sido en un claro fuera de juego.
En el minuto 43, el Tudelano tenía opciones de hacer el (0-2) tras una falta lateral, dónde un centro-chut peligroso de Álex se iba rozando el poste. Los jugadores del Huesca, apenas sin inmutarse, dejaban que el balón saliese fuera. Tras ello, llegó lo mejor del partido, el descanso. Tocaba que David Navarro alentara a sus jugadores en el vestuario.
Lo que cambian las cosas en un minuto
El Huesca salió con más ganas que el Tudelano, notándose en la posesión del balón. David Navarro hacía un cambio táctico en su esquema, dando más libertad a Álex Bernal por el centro del campo para generar una mayor velocidad a los atacantes Guillem y Ramón.
En el minuto 46, Marcos Mauro pedía el cambio tras haber recibido un aparatoso golpe en la boca, produciendo una hemorragia. En su lugar entraba Gárces, el chico de la casa. Por las botas de Rausell llegaba todo el peligro del Huesca, con sus tiros desde fuera del área y el juego combinativo con Bernal y Marc.
Miguel tuvo en sus botas el (0-2) para el Tudelano, se metió en el área y en el segundo recorte estuvo rápido Gaspar para quitarle el balón. Navarro hacia su segundo cambio, entraba Veintemilla debutando con el Huesca y salía Rausell, ya agotado.
Pocos minutos después, en el 75, llegaría el penalti para el Huesca dónde fue derribado Bernal. Ante la falta del tirador de penaltis, Camacho; Guillem Martí estuvo a la altura anotando el gol del empate para los oscenses.
Un minuto después, tras una recuperación de Scardina y un pase en largo de éste sobre la defensa del Tudelano, permitía que Guillem casi sin ángulo, batiera la portería de Asín remontando él solo el partido.
El tudelano aún tuvo la última del encuentro donde salvó muy bien Rubén Pérez, cuándo ya estaba batido, se lanzó y tapó el hueco que dejo libre tras su salida.
El Huesca aún movía fichas, salía Bernal dando entrada a Tariq. El emiratí, jugaba sus últimos minutos con la camiseta del Huesca en la que ha sido la peor temporada de éste. El partido finalizaba con el triunfo azulgrana, para cerrar de una manera digna una mala campaña.