Similitudes. Eso es lo que guarda la actual campaña de Liga con la de 2009/2010. Ningún otro campeonato de Liga ha exigido tanto esfuerzo al que finalmente se proclame campeón. Y probablemente ninguna otra Liga tenga tanto mérito, circunstancia que obliga al Barcelona a exigirse una última victoria ante Atlético de Madrid, que busca lo mismo: alzar el trofeo liguero.

Aquella temporada, fue la última de las seis ligas conseguidas hasta el momento por el FC Barcelona en casa. Con Pep Guardiola en el banquillo, el 16 de mayo de 2010 el Barça se impuso al Real Valladolid, que terminó descendiendo al infierno de Segunda, para proclamarse campeón de Liga.

Similitudes, sí. El Barça ya sabe lo que es ganar la Liga en la última jornada de competición. Y también ganarla ante su afición. Sin embargo, no sabe hacerlo en un duelo convertido en final. Los precedentes no le avalan. Ya vivió la misma situación del próximo sábado. Y terminó con título para el Sevilla.

La Liga de Pep

Liga de records. Aquel campeonato liguero, en el que el conjunto azulgrana superó el récord histórico de puntos, no sufrió ni una derrota y fue líder durante las 27 de las 37 jornadas disputadas. Sin embargo, llegaron al partido final con la necesidad de ganar para alzarse con un nuevo título. Su perseguidor, el Real Madrid, tenía otro partido: ante el Málaga.

El FC Barcelona dependía de sí mismo: tenía que ganar su partido Tan solo eso y no mirar lo que hiciera el conjunto blanco ante el Málaga. Algo que sí tenía que hacer el Real Valladolid si perdía, para lograr e milagro de la salvación. Que no llegó.

Pep tenía ante sí al Pucela de Javier Clemente, al borde del abismo. Sin Xavi, sancionado por acumulación de tarjetas y con un Iniesta recién salido de lesión. Al borde del abismo, pero dependiendo de sí mismos. Podían recordar temporadas pasadas, como la salvación conseguida in extremis ante el Betis. O un año antes empatando en Huelva. Viajaban desde Zorrilla con la necesidad y sin Álvaro Rubio, Sisi, Del Horno, Nivaldo y Lázaro, y, además, Borja Fernández estaba sancionado.

Goleada y campeonato

El Real Valladolid saltó al terreno de juego con todo y pudo adelantarse en los primeros minutos, pero no hubo acierto. Los hombres de Pep Guardiola temblaban en defensa, con errores propios de otros equipos. Pudo costarle el primer tanto de las botas de Manucho, que tras un mal despeje de Valdés no vio portería.

Poco a poco, el Barça supo serenar la presión a base de toque y posesión. Para el cuarto de hora, llegaban buenas noticias para los intereses azulgrana desde La Rosaleda. Duda marcaba para el Málaga y hundía al Real Madrid. Fue en ese momento cuando se pudo ver al mejor Barça. Tras varios intentos de Messi, en cuatro minutos se resolvía el partido. Pedro hizo la jugada del primer tanto del partido, que acabó entrando en la portería blanquivioleta por Luis Prieto. El segundo sí que lo anotaría el canario, tras combinar con Messi y batir a Jacobo.

La segunda parte sirvió de homenaje en el Camp Nou. Los 45 minutos eran lo que restaba para la fiesta culé. El equipo trabajó para Leo Messi, que con otras dos dianas, marca de la casa, igualaba el récord goleador de Ronaldo 34 tantos en Liga. Y servía para ensalzarle más como pichichi y 'Bota de Oro' de la temporada. Reaparición de Andrés Iniesta, homenaje a Ibrahimovic y Henry. E incluso, aplaudir el proyecto de Joan Laporta. Un proyecto que ponía punto y final con un total de 12 títulos.

Desde lejos, llegaban las malas noticias para el Real Valladolid. El Real Madrid no pasaba del empate a uno ante el Málaga y el Valencia vencía al Tenerife. El Real Valladolid se encontraba en medio de la fiesta de la celebración del campeón de Primera, siendo ya equipo de Segunda División.

El FC Barcelona no falló y goleó sin contemplaciones al Real Valladolid por 4-0.  En la última jornada de Liga y ante su público, para conseguir su vigésimo título liguero, el cuarto en la última década, con un récord histórico de puntos: 99.