Real Madrid 2013/14: Xabi Alonso

La 2013/14 fue una temporada llena de distintos contrastes para Xabi Alonso. No logró debutar hasta octubre cuando jugó contra el Sevilla en la undécima jornada de Liga. Era su primer partido desde la final de Copa del Rey que perdió el Real Madrid contra el Atlético el 17 de mayo del 2013. En aquel partido apenas jugó 26 minutos. Después de dos intervenciones quirúrgicas; una para corregir la pubalgia que arrastraba y la otra para componer la fractura del quinto metatarsiano del pie derecho que se hizo en agosto.

El 8 de enero y tras 13 partidos jugados desde su regreso, el Real Madrid hizo oficial la renovación del contrato del tolosarra por dos años más. Xabi tuvo en Ancelotti su gran influencia para renovar con el Madrid. Se confirmó como jugador blanco hasta 2016 y con un aumento del sueldo del 50%.

Conforme pasaban los días, la mejor versión de Xabi volvía, sin embargo, esta temporada también estuvo llena de altibajos de nivel. El mejor aliado de Alonso para evitar su caída fue Luka Modric, su fiel compañero en el medio campo. La gran campaña del croata ayudó al de Tolosa sobre todo en sus malos partidos. Aunque aún con Xabi Alonso sin estar en su mejor estado de forma, el Real Madrid notaba su presencia.

El mejor Xabi Alonso se comenzó a ver en el último cuarto de la temporada. Cuando más le necesitaba el equipo y cuando más críticas le llovían. Fue clave en la eliminatoria frente al Borussia Dortmund. Sobre todo en la vuelta, la cual fue marcada por la tormenta alemana que azotó a la defensa madridista durante todo el partido. Alonso se comportó a la altura que acostumbra y pasó con nota ese partido.

Ya contra el Bayern Múnich, la mejor versión de Xabi de la temporada salió a la luz. La ida fue impecable para el tolosarra. Al ser consciente que con una tarjeta amarilla más se perdería la vuelta, jugó reservado pero con la seriedad necesaria como para no jugar con la dureza que tiene acostumbrado. Fue su mejor partido de la temporada. En la vuelta, una desafortunada acción al con la proeza hecha, con el partido sentenciado, una desafortunada entrada en el 38' lo dejó sin final. Fue amonestado; el gesto tras ver a Pedro Proenca sacar la tarjeta lo dijo todo. Se quedó tirado en el suelo, se llevó las manos a la cabeza y se tiró el cabello.

En liga, Xabi Alonso no pudo evitar el desplome del equipo cuando los resultados y el destino se habían acomodado de tal forma que el Real Madrid llegó a depender de ellos mismos para tener el campeonato. Incluso, en el partido contra el Celta de Vigo, en un arrebato de nervios y desconcentración, el ‘14’ le regaló un balón a Charles, quien sólo frente a Diego López, puso el 2-0 en el marcador. Aquel día, cualquier esperanza del equipo merengue por ganar la Liga, se esfumó.

La final de Champions League la tuvo que vivir como un aficionado más: en las gradas. El brincó para saltar al campo y la corrida que hizo, aún con traje puesto, pasará a la historia del Real Madrid. Pese a no jugarla, Xabi también será recordado por la emoción y pasión con la que vivió el partido de la Décima en Lisboa.

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