Ser el líder del centro del campo del Real Madrid es una tarea titánica. Más allá de la calidad futbolística que desprenden las botas del dueño de la medular blanca, un puesto de importancia tan capital en el club es observado minuciosamente por los ojos de cualquier crítico, merengue o no. Sin embargo, parece que ese problema no entra en la cabeza de Toni Kroos.

El centrocampista alemán, fichado en el mercado de verano, se ha hecho con los mandos del Real Madrid desde el primer día. Su toque de balón, su calma, su precisión y su visión de juego ha deslumbrado en apenas dos partidos (Supercopa de Europa e ida de la Supercopa de España) a propios y extraños. En un 4-3-3 de Carlo Ancelotti en el que el año pasado fueron Modrić y Alonso los encargados de distribuir el balón, el nuevo dorsal número ocho del Madrid ha llegado para quedarse.

Si la presión desde fuera del terreno de juego parece no ser un motivo de preocupación para Toni Kroos, ahora ha de demostrar que la presión en el césped tampoco le impide brillar. Y para ello, tendrá delante hoy, 22 de agosto, a las 22:30, a uno de los equipos más asfixiantes de Europa. No es otro que el vecino e íntimo rival, el Atlético de Madrid. Tras una primera toma de contacto en la ida en el Bernabéu, Toni Kroos vuelve a enfrentarse a la maraña de los hombres de Simeone.

El reto de la presión rojiblanca

Uno de los principales activos del Atlético de Madrid es sin duda su presión en la mitad de campo. El sacrificio, compromiso y sentido táctico del bloque colchonero ha valido el reconocimiento mundial de una fórmula que ha logrado el éxito cuando pocos lo esperaban. Y, como no podía ser de otra forma, Simeone se mantuvo fiel a su estilo en la ida en el Bernabéu.

El entrenador del Atlético reconoció en la rueda de prensa posterior al partido que su intención era la de ahogar a su rival en el centro del campo, y para ello superpobló la medular del campo. Como consecuencia, los medios del Real Madrid (Kroos, Modrić y Alonso) sufrieron más que en la Supercopa de Europa.

No fue un partido nada cómodo para Kroos. Con la presencia constante de Gabi, Mario Suárez o Saúl, el alemán tenía que rebuscar en su repertorio para esquivar la férrea defensa rival. Además, con Xabi Alonso acompañándole estuvo más limitado en las labores de creación respecto a la Supercopa de Europa, donde sus acompañantes en el centro del campo, James y Modrić, le cedieron la batuta. A pesar de ello, cuajó un buen partido, y no sólo en el aspecto ofensivo, sino también en defensa, realizando un gran trabajo táctico de cobertura.

El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, ha asegurado en las horas previas al encuentro que el equipo necesita más velocidad si quiere salir campeón del Vicente Calderón. El atasco intencionado que generó el Atlético obligó a oxigenar el juego por las bandas y redujo la circulación de balón. Es aquí donde Toni Kroos se perfila como el hombre destinado a ser la llave que abra semejante "cárcel".

El criterio y la proyección ofensiva del alemán se antojan fundamentales de cara a un rival tan correoso. No sólo es un gran distribuidor del esférico, sino que también tiene características de llegador al área, y es especialmente peligroso cuando ronda la frontal del área. Ancelotti le ha entregado el centro del campo, pero es ahora Simeone el que pretende que Kroos desaparezca. De su adaptación a la compañía de Xabi Alonso o de su asignación como centrocampista más retrasado (en el caso de que Alonso no salga de titular) dependerá su juego. Y a partir de él, el Madrid se moverá.

Sin olvidar la portería rival

Cuando se habla de un jugador tan completo como Toni Kroos, no se puede pasar por alto su capacidad ofensiva de cara al arco del contrario. El alemán tiene mucho de mediapunta y gracias a ello es un gran pasador en espacios cortos y un eficiente goleador.

Su faceta de mediapunta pasador la pudo ver el Atlético de Madrid en la ida, pues el gol de James vino precedido de un pase preciso de Kroos desde la frontal del área a Carvajal, que se desmarcó por la banda y colgó un balón raso al área que acabaría con el gol del colombiano. Su polivalencia, un arma de gran peligro.

Kroos también sabe lo que es que sus balones acaben en el fondo de las mallas. Aún no ha tenido tiempo de celebrar un gol con la elástica blanca, pero su capacidad de tiro y su historial en el Bayern de Múnich aseguran goles. No en vano, en la ida de la Supercopa de España tuvo una inmejorable ocasión tras un rechace de una potente falta de Gareth Bale, pero cuando estaba solo ante Moyá envió el balón a las nubes al no poder acomodar el cuerpo para el remate.

Es por ello que la labor de Toni Kroos frente al Atlético de Madrid no se reducirá a la distribución y la canalización del juego. Si los rojiblancos quieren aspirar al título, uno de los apuntes que deben tener en la libreta es el de vigilar al alemán cuando merodee el área.

Son pocas las semanas que Kroos lleva en el Real Madrid. Pocos son también los partidos que ha jugado con el club. Pero para Carlo Ancelotti ya es un pilar fundamental del centro del campo, y es en partidos como el de la Supercopa de España donde jugadores como él están llamados a brillar. La llave del Real Madrid está fabricada en Alemania.

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Sobre el autor
Nacho González Rueda
Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid. Coordinador de NBA. Redactor de Real Madrid y Premier League. Creo en el ´where amazing happens´ del baloncesto americano, en la eternidad de los vikingos y en la magia de un campo de fútbol inglés. También fui redactor del Mundial de Fútbol Brasil 2014 y Mundial de Baloncesto España 2014. Contacto: [email protected] ¡Nos leemos!