Nunca dos grupos ultras tan conocidos en España hicieron tanto por la unidad entre dos clubes que hoy volverán a verse las caras en el IV Trofeo de Vallecas. Si ya de por sí las conexiones entre el Rayo Vallecano y el Cádiz CF fueran muchas gracias a la cantidad de jugadores que vistieron ambas elásticas, esta amistad terminó de cuajar con la empatía entre sus dos aficiones, especialmente gracias al ya conocido por toda España, el hermanamiento de dos grupos ultras como Brigadas Amarillas y Bukaneros. Independientemente de la ideología política con la que comulgan estas dos hinchadas (antifascistas se autodenominan), lo cierto es que de hace ya unas décadas han conseguido convertir cada Cádiz - Rayo Vallecano o viceversa en una auténtica fiesta en la grada al margen de cuanto acontezca en el terreno de juego.
Esta unidad se remonta a principios de los años 90. Para ser más exacto se inicia con el primer viaje que hace los Bukaneros del Rayo Vallecano a Cádiz con ocasión del enfrentamiento del conjunto cadista ante el madrileño en el conocido Trofeo Ramón de Carranza que se disputa cada verano en la ciudad de Cádiz. En ese enfrentamiento comienzan a respetarse mutuamente, pero no va a ser dos años más tarde cuando este acercamiento entre aficiones se formaliza de forma notable, cuando varios gaditanos comienzan a formar un grupo radical vallecano. Y es que, tal y como cuentan en la web de Bukaneros, en la temporada 95/96 algunos miembros de las recién creadas Brigadas Amarillas se introducen en el grupo rayista, que pasa en un sólo año de 15 a 40 miembros y comienza a crecer notablemente.
A partir de ahí, ambos equipos se han enfrentado numerosas veces, especialmente en Segunda División, más conocida actualmente como Liga Adelante, donde cadistas y rayistas se enfrentaron en numerosas ocasiones.
Sendas hinchadas no sólo han mantenido el contacto sino que incluso han aprovechado varias desplazamientos para confraternizar más todavía. Basta con ver como en ambos fondos donde se ubican estas aficiones aparecen las insignias de la hinchada hermana en la distancia. Muchas veces cuando el equipo cadista ha disputado partidos en Madrid, muchísimos bukaneros se han desplazado para animar al equipo cadista por esa hermandad que une tanto.
Sin duda un bonito gesto que hayan equipos así, y que además de disfrutar de un buen partido de fútbol queden también signos de amistad y diversión. Han tenido que pasar varios años para que el cántico instaurado hace años por unos y otros de "sangre gaditana en vena vallecana" vuelva a sonar con fuerza y al unísono en Vallecas y en el Ramón de Carraza".
