En el once del filial blanco destacaba la entrada de nuevo de Odegaard en la mediapunta y con el 10 a la espalda, dejando claro que sería el encargado de canalizar las ofensivas madridistas. Medrán en este caso acompañaría a Torró en el doble pivote.

Los primeros compases del partido serían dominados por el equipo local. Las llegadas por banda de Javi Muñoz y Burgui, unido a las de los laterales Varela y Noblejas abrían muchos espacios en la zaga del Barakaldo.

La expectación vivida desde hace varias semanas por la llegada del mediático Odegaard se vería refrendada a los 7 minutos con el primer tanto del noruego como jugador blanco. Un contraataque llevado por De Tomás, el cual deleitaría a la grada con varios recortes, sería finalizado por Odegaard con la diestra a placer.

Mientras el conjunto visitante intentaba hacerse con el control del juego y acechar la portería madridista, los contraataques blancos se sucedían, lanzados gracias a la velocidad de hombres como Burgui. Javi Muñoz pudo ampliar la ventaja con un envío cruzado que salió cercano al poste izquierdo de Pato.

Tanto fue el cántaro a la fuente que poco antes del descanso, en concreto en el minuto 41, un centro de Odegaard desde el costado izquierdo no podría ser cabezeado por Medrán en el área “chica” pero el cuero caería en el borde del área y allí aparecería el lateral Varela para lanzar un durísimo disparo raso que ampliaría la ventaja madridista.

Segunda mitad:

Tras el paso por vestuarios, si el Barakaldo pretendía salir en tromba a por la remontada, se llevó un buen susto en la primera jugada. Una gran jugada de Burgui por banda izquierda sería repelida por la defensa visitante en el último momento.

A continuación, la figura de Odegaard volvería a escena con dos acciones, un pase entre líneas y dos regates seguidos, en donde dejaría muestras de su clase. Pero el bajón físico de todos los hombres se empezaría a notar y comenzaría el carrusel de cambios. Álvaro Jiménez y Mariano darían refresco a un ataque madridista visiblemente cansado.

Cuando parecía que el marcador ya no se movería dos golpes acabarían de derrotar al Barakaldo. De nuevo otra contra del Castilla pondría la “puntilla” a los visitantes. El robo y pase de Álvaro Jiménez dejaría a Mariano en carrera, el cual tras superar a su defensor pondría un disparo cruzado pegado a la base del poste diestro de Pato.

Y por último, otra a vez con una salida rápida sería esta vez Medrán el que superaría al guardameta visitante. Victoria muy importante para los de Zidane que refuerzan su liderato ante uno de los rivales más complicados a priori en la categoría.