Apenas tres días después de certificar que la reválida del título liguero ya es inalcanzable, el Atlético de Madrid buscará olvidar sus penas entregándose en cuerpo y alma a la competición que anhela desde el mes de septiembre y en la que el año pasado se llevó el más fuerte de los mazazos. Vuelve la Champions, y con ella el vecino -por séptima y no última vez este año- que en Lisboa se vistió de verdugo y le ejecutó con crueldad y casi sin tiempo. De nuevo el Real Madrid al otro lado del ring.

Hasta ocho veces se habrán visto las caras ambos equipos al término de la eliminatoria

El partido de fútbol más repetido del mundo en esta campaña se reedita y, lejos de cansar, excita a unos y otros más que la vez anterior y menos que la próxima, de aquí en apenas ocho días. Con las espadas en todo lo alto, al deseo de seguir caminando rumbo a Berlín se une el morbo de ganar al eterno rival. El bastón de mando, que ahora se tiñe de rojiblanco tras el terrible dominio de los últimos seis duelos, vuelve a estar en el aire.

El presente contra Lisboa

De cara a fortalecerse antes de saltar al verde, cada cual tiene sus motivos. En el bando local el Atleti se apoya, aunque no por ello relajándose ni lo más mínimo, en las apabullantes estadísticas del curso: cuatro victorias y dos empates con sabor a ídem -ambos fueron clave en eliminatorias a doble partido- en seis enfrentamientos. Doce goles a favor por solo cuatro en contra. Un título -la Supercopa de España-, una clasificación -para los Cuartos de final de la Copa del Rey- y, para redondear la faena, dos ganchos directos a las aspiraciones de Liga blancas.

En el lado contrario, el Real Madrid trata de 'chinchar' con el infausto recuerdo para los indios de la pasada final de la Champions League. El gol de Sergio Ramos en el minuto 93, preludio de la remontada, sigue siendo motivo de orgullo pese a los seis envites siguientes, el más reciente (4-0) rozando el ridículo.

El Calderón, nuevamente aliado

Con una batalla táctica por delante que se prevé apasionante, el 'Cholo' no desveló aún cuál será el once elegido para una noche de las que hacen afición. Solo resolvió las dudas de la portería, donde Oblak seguirá situado tras relevar a Moyá, y la delantera, en la que un recuperado Mario Mandzukic reclama sitio. Torres tendrá que esperar. Aparte de los citados, serán titulares también a tenor de lo que ha sucedido toda la temporada Juanfran, Godín, Tiago, Koke, Arda y Griezmann.

Las dicotomías que se le plantean al 'Cholo' en el resto de posiciones son, cuanto menos, interesantes. Y lo son sobre todo porque han surgido por el buen hacer de los suplentes. Es el caso de Giménez, que peleará con Miranda por acompañar al faraón en el eje de la zaga, si bien parece que Simeone tirará de su vena costumbrista para situar junta a la pareja de centrales más exitosa de la historia del club.

Otra duda en la defensa es la del lateral izquierdo. Jesús Gámez, de menos a más en la temporada, se ha asentado en la posición, si bien sigue pecando de poco osado en ataque, toda vez que no juega cómodo a pierna cambiada. A su favor juega la coyuntura de la eliminatoria: empezando en casa, defender la portería propia es vital. A favor de la otra opción, Siqueira, está su partidazo en el 4-0 liguero, asistencia de gol incluida.

La tercera duda en cuestión surge en la sala de máquinas. Gabi, el capitán, no brilla como el año pasado pese a hacer un partidazo en el último derby al igual que Siqueira. Su puesto podría ser ocupado por Mario Suárez, que brilló ante el Leverkusen y este lunes ofreció junto a Simone la habitual rueda de prensa previa, en la que siempre comparece un jugador que va a ser titular al día siguiente.

Todo en torno a Arda

Al albor de un Calderón que será una auténtica olla a presión, con más de 50.000 bufandas preparadas para el momento en que suene el himno del Atleti, el as en la manga local será Arda Turan. Simeone, que de tanta ventaja que le viene sacando a Ancelotti en lo táctico ya quiere echarle un cable, dejó claras sus intenciones con respecto al genio turco en rueda de prensa. "Estamos compensando a mi gusto demasiado el juego por la derecha y queremos compensar un poco más por ese sector izquierdo con la aparición de Griezmann y no agrupar a mucha gente por la derecha. Es verdad que a Arda le conviene tener más espacio para poder disfrutar de su uno contra uno", desveló dejando entrever que el de Bayrampasa será el eje de todo.

Y es que en un partido de ida, con todas las papeletas para que se vea un encuentro cerrado y táctico, disponer de futbolistas como Arda es una bendición. Seguro que allá donde esté el triste y recientemente desaparecido Eduardo Galeano disfrutará de lo que haga el otomano, a quien parecía describir en sus famosas líneas. "Por suerte todavía aparece en las canchas, aunque sea de vez en cuando, algún descarado carasucia que se sale del libreto y comete el disparate de gambetear a todo el equipo rival, y al juez, y al público de las tribunas, por el puro goce del cuerpo que se lanza a la aventura prohibida de la libertad".

No será esta la única baza del 'Cholo'. Recuperado el tino del conjunto rojiblanco en el balón parado tras una racha nefasta en este aspecto, volverá la amenaza aérea. Además, un Griezmann en estado de gracia intentará hacer de las suyas. Su verticalidad hará temblar las espaldas de los laterales blancos, que a buen seguro reduzcan sus excursiones a territorio comanche, especialmente Carvajal por la tendencia del punta galo a caer al costado siniestro. También habrá recursos en el banquillo: la velocidad de Torres, el fútbol de Cani o Saúl y el desatascador favorito del míster, Raúl García. El navarro, ya con el alta tras su fractura de cúbito ante el Leverkusen, tendrá minutos e incluso podría entrar en el once si Simeone innova, aunque no parece demasiado probable.

Ancelotti, a desempolvar los manuales de Dvoretsky

El míster del Real Madrid, Carlo Ancelotti, prefirió ver Ben Hur el pasado domingo antes que el Sevilla - Barcelona. Quizás el transalpino debió cambiar el cine por la lectura y haber cogido algún libro de Dvoretsky, a la sazón el mejor y más famoso entrenador de ajedrez de la historia. Vilipendiado por Simeone en todos los seis duelos previos del curso, necesita variar algo si quiere irse del Calderón vivo en la eliminatoria. Repetir errores pasados será, salvo sorpresa basada en el enorme talento individual de los merengues, mal presagio.

Bale, intocable en el once, tendrá que sudar más que de costumbre para convertir el 4-3-3 en 4-4-2

Y ni con estas parece que las variaciones vayan a ser muchas ni notorias. El esqueleto de su Madrid volverá a tener forma de 4-3-3, y la única nota diferente con respecto a su ideario habitual será la misma que en el Camp Nou, donde jugó mejor que el FC Barcelona pese a terminar cayendo. Esta se centrará en la posición de Bale y será sencilla: arriba en ataque, atrás en defensa. El 'correcaminos' galés, uno de los principales señalados por la grada del Bernabéu en la reciente crisis de resultados ya solventada, es también el más damnificado. Aún sin perder su puesto, tendrá que exprimir el cuentakilómetros para convertir el sistema en un 4-4-2 sin balón, ocupando Modric o James el otro costado en el repliegue.

Ni un solo secreto en el resto de la alineación blanca. Le vuelve a tocar banquillo a Isco, algo tocado físicamente y suplente con justicia tras serlo en un atentado contra el fútbol cuando estuvo sublime en el ecuador de la temporada. La medular será ahora más electrizante con la reaparición de James, que no asegura control pero sí llegada, y hace de cada subida un temblor de piernas para el portero rival. Eso sí, cada vez que no termine las flechas rojiblancas saldrán certeras. Arma de doble filo para el Real Madrid la presencia del llegador cafetero.

Hasta ahora, sin embargo, la reaparición de Rodríguez ha sido fundamental. Con él en forma, el equipo ha vencido en sus tres últimos compromisos ligueros goleando incluso al Granada. Su verticalidad ha sacado del letargo además al hombre clave, Cristiano Ronaldo. Siempre hambriento y jamás cansado pese a hacer historia casi a cada paso que da, el luso ha subido el nivel en las últimas semanas, y quiere recuperar el olfato ante una de sus víctimas favoritas y a la que ya ha hincado el diente dos veces esta temporada pese a que los suyos no hayan ganado en ninguna ocasión.

Convocatorias y posibles onces

Para tan importante encuentro, ambos entrenadores han citado a todos sus jugadores disponibles, dejando para horas antes del encuentro las listas definitivas. Cabe destacar que hay hasta ocho hombres apercibidos de suspensión. Se perderían el encuentro de vuelta si ven una tarjeta esta martes los atléticos Ansaldi -no parece preocupar mucho esto a Simeone-, Siqueira y Torres, así como dos de los tres habituales mediocentros, Gabi y Mario, posible motivo de que solo uno de los sea de la partida mañana acompañando a Tiago.

En el Real Madrid son tres los jugadores que se encuentran a una cartulina de la sanción: ambos laterales izquierdos, Coentrao y Marcelo, y el importantísimo centrocampista organizador Toni Kroos.

Atlético de Madrid: Oblak, Moyá; Juanfran, Jesús Gámez, Miranda, Godín, Giménez, Lucas, Ansldi, Siqueira; Mario Suárez, Gabi, Tiago, Koke, Saúl, Cani, Arda, Raúl García, Griezmann, Fernando Torres, Raúl Jiménez y Mandzukic.

Real Madrid: Casillas, Keylor Navas; Carvajal, Arbeloa, Sergio Ramos, Pepe, Varane, Marcelo, Coentrao, Nacho; Kroos, Lucas Silva, Illarramendi Modric, James, Isco; Jesé, Bale, Cristiano Ronaldo, 'Chicharito' y Benzema.