¡Nos han cambiado a Mojica!  Exclamaba desde la grada del Estadio José Zorrilla un joven aficionado del Real Valladolid ataviado con la camisola blanca y violeta de su equipo el pasado sábado, en la victoria, sin brillo, de su equipo ante el Mirandés. Y la verdad es que razón no le faltaba al susodicho. Desde el pasado día 15 de febrero en el que el tres del Pucela tuvo que ser sustituido en el minuto 53 por un golpe en el tobillo que le mantuvo lejos de los terrenos de juego cuatro jornadas, no ha vuelto a ser el mismo el bueno del cafetero. Fue ante Tenerife, Sporting de Gijón, Real Betis y Numancia, donde el equipo sacó seis de los doce puntos en juego.

El extremo, que acumula siete tantos en Liga no pasa por su mejor momento a pesar de haber debutado, con gol, con su selección, la colombiana, en la victoria de los de Pékerman ante Bahrein por cero tantos a seis el pasado mes de marzo.

Un Mojica diferente

Algo ha cambiado en el lateral, reconvertido esta temporada por Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’ a extremo izquierdo, que ha pasado de ser un jugador vertical, rápido y difícil de parar por parte de los jugadores rivales, a un futbolista previsible, falto de velocidad y al que le falta esa chispa que le hizo único y posiblemente el mejor jugador de la categoría, en las jornadas anteriores a su lesión.

El colombiano está mucho más vigilado por la defensa rival que al inicio de la temporada

Los rivales le conocen y el de Cali está mucho más vigilado por la defensa enemiga, que a base de escaramuzas fundamentadas en la superioridad numérica, están haciendo que la estrella pucelana brille menos. Las ayudas al lateral que defiende a Mojica son constantes y en ocasiones de más de un jugador, y el futbolista del Pucela está buscando, como dijo el pasado martes en rueda de prensa, soluciones para convertirse en una pieza mucho más utilizable entre líneas. Si el tres del Real Valladolid busca remedio y solución y comprende que si no puede desbordar por banda, por dentro puede generar un montón de espacios, la escuadra que preside Carlos Suárez disfrutará de un Mojica diferente, pero igual de peligroso, que ha de volver a ser piedra angular de este equipo.

Foto: Real Valladolid.

La Copa América en la mente

Desde que el extremo cafetero debutara con su selección hace menos de un mes, concretamente el  pasado 26 de marzo en la goleada del combinado cafetero sobre Bahréin por 0-6, Mojica solo tiene una fecha en mente, el 14 de junio de este mismo año, día en el que Colombia debuta en la Copa América ante Venezuela.

El colombiano tiene en mente acudir a la Copa América con su selección

Los de Pékerman han quedado encuadrados en el grupo C junto a Brasil, Perú y Venezuela, y con solo 23 años, el extremo del Real Valladolid quiere acudir a la cita en lo que sería un importante empujón en una carrera futbolística que acaba de comenzar y que, a tenor de lo visto esta campaña, promete en demasía.

Solo dos partidos, el ya citado ante Bahréin y tres días después ante Kuwait, en el que el tres del pucela estuvo en el banquillo pero no disputó ni un solo minuto, parecen un pobre bagaje para que el bueno de Mojica acuda a tan importante cita, sin embargo, de recuperar el mejor nivel mostrado a lo largo de la temporada, no cabe la menor duda que irá a la cita sudamericana y que gozará de minutos en una selección en la que hay estrellas del fútbol mundial como el madridista James Rodríguez, o los goleadores del Sevilla y Manchester United respectivamente Carlos Bacca y Radamel Falcao.

El Pucela necesita la mejor versión del colombiano

En estas nueve fechas que restan para finalizar una apretada Liga Adelante en la que parece que el Real Betis se va a hacer con una plaza de ascenso directo y Las Palmas, Girona, Sporting de Gijón y Real Valladolid van a tener que luchar por la restante, la mejor versión del jugador cedido por el Rayo Vallecano es importante para abordar el difícil reto de volver a la primera categoría del fútbol español.

Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’ es consciente de que su equipo necesita la mejor versión del colombiano y no tuvo reparo alguno en alinearle desde el inicio en el choque, de mal recuerdo, en Montilivi, con la derrota ante el Girona, a pesar de que, aunque jugó unos minutos con su combinado, en Liga se había perdido los últimos cuatro encuentros. Con el paso de las jornadas y cuando vuelva a rodarse, será vital que Mojica vuelva a demostrar todo el fútbol y el talento que lleva dentro y vuelva a contar con la chispa que tenía antes de la lesión y que tan buen resultado dio, hasta el partido ante el Alcorcón, para el Real Valladolid.