La jornada 33 de la liga BBVA se cerraba este lunes con el partido entre Valencia y Granada. Objetivos distintos. Misma necesidad de ganar. El Valencia en la pugna por volver a la élite europea. El Granada desoso de salir del infierno del descenso. La justicia hizo valer su poder. El Valencia logro la victoria por 4 a 0 ante un deble y cariacotencido Granada. El Valencia recupera la cuarta plaza con 68 puntos y sigue persiguiendo al Atlético. El Granada continuará 19º, a seis del Almería, 17º que marca el último puesto de salvación, y ante un muro cada vez más difícil de superar.
La pieza que nunca falla
Corría casi el primer tercio de un partido hastiado y denso, controlado por el Valencia, sin ocasiones. Delante un Granada sin ideas, con timidos ataques y aproximaciones. En busca de la divinidad. El conjunto ché empezó a carburar y bordeaba el gol. Fue en ese momento, cuando de un gran córner botado por Parejo, apareció Javi Fuego para rematar el balón con la cabeza a la red. El hombre que permanece en la sombra. La escoba de Nuno Espirito Santo. Hoy desatascó el partido con un soberbio testarazo. Insustituible. La pieza que nunca falla.
Menos de un cuarto de hora después, Feghouli, en estado de gracia, internó un balón a Barragán, que tras un brillante autopase, provocó el penalti que transformaría Daniel Parejo. Esta vez sí lo anotó. El centrocampo del Valencia cerraba el partido antes del descanso.
Incombustible Feghouli
Hoy brilló una estrella en Mestalla. Tenía nombre y apellidos: Sofiane Feghouli. El extremo argelino vivió una de sus mejores noches en la ciudad del Turia. Inmeso. Omnipresente. La banda derecha de este Valencia fue una auténtica pesadilla para los andaluces. Abel Resino se mostraba resignado ante la difícil acometida que tenía presente. Fue la mejor pareja posible para Barragán. Incansable por esa banda. Insúa y Martins no se olvidarán facilmente del "ché". Sin embargo, esta estrella explotó en el minuto 85. Una contra del Valencia fue terminada por "Sosó" con una excelsa definición sobre Roberto. Se cerraba el partido. 3-0, y el Valencia volvía a ser cuarto. El conjunto blanquinegro vuelve a estar en el retrovisor del Atlético de Madrid.
El tiburón no se apiada del Granada
Minuto 68. Partido encarrilado que tenía el Valencia. Nuno comenzó a pensar en Vallecas. La segunda final de las seis que le queda al conjunto ché para conseguir el ansaido objetivo: La vuelta a la Champions League. El técnico portugués dio entrada de manera rauda y dinámica a Enzo Pérez, De Paul, y Álvaro Negredo. El tiburón sustituía a un extraño y apático Paco Alcacer. El "7" valencianista tenía ante él otra oportunidad de seguir creciendo, de seguir despertando. Y así fue, del mismo modo que anotó André Gomes ante el Córdoba, Rodrigo de Paul puso un balón al segundo palo, para que la bomba del Valencia acomodara el cuello a la perfección y pusiera el defitivo y maravilloso 4-0. Dos goles en los últimos dos partidos en Mestalla. El Tiburón de Vallecas cada vez está más en forma. El Rayo Vallecano, la próxima presa.