La entidad presidida por Javier Tebas, la Liga de Fútbol Profesional, ha ganado la batalla la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) presidida por Luis Rubiales. La huelga ha quedado suspendida, cautelarmente, así que las competiciones nacionales transcurrirán con normalidad.

La Liga deberá depositar una caución de unos cinco millones de euros, cantidad que el abogado que representa a los clubes de fútbol estimó que serían las pérdidas si la suspensión se llevaba a cabo.

Con esta decisión, el Real Zaragoza disputará el próximo domingo el partido correspondiente a la jornada 38 ante el Girona FC. El conjunto aragonés mostró su disconformidad de convocar esta huelga a partir del día 16 de mayo ya que, tal y como se indicó en un comunicado del club, “no es el momento adecuado para llevar a cabo estas iniciativas”. Este tramo de la temporada es un momento crucial para el equipo y hubiese puesto en peligro los cinco partidos que restan de temporada en los que se decidirá si el Real Zaragoza juega o no el play off. El club aragonés no quiere distracciones en este último tramo y menos tan granes como la de suspender estos últimos cinco partidos o el estar preparándolos sin saber si se iban a jugar o no.

Finalmente, la jornada se disputará con normalidad aunque esta polémica no ha finalizado todavía. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tiene la última palabra. Con Ángle María Villar a la cabeza, la RFEF, que convocó la huelga el pasado 6 de mayo, podría ejercer su derecho a no enviar equipos arbitrales a los diferentes estadios, una medida que, sin embargo, parece poco probable según el criterio de Tebas.

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Sobre el autor
Andrea Merle
Zaragozana. Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid.