El partido de este sábado será especial para Guilherme Siqueira. El brasileño vuelve a la que fue su casa durante tres temporadas y el lugar que le sirvió de trampolín para demostrar todo su potencial. Siqueira recaló en el Granada en la temporada 2010/2011 tras dar varios tumbos por Italia. En el país transalpino pasó por los filiales de Inter de Milán y Lazio, y el primer equipo del Udinese y Ancona, pero nunca llegó a cumplir las altas expectativas que habían depositado en él.

Aterriza en el verano de 2010 en Granada con la esperanza de volver a recuperar la esperanza perdida en Italia. El conjunto andaluz estaba en Segunda división y estaba formando un importante proyecto para volver a la máxima categoría. Esa temporada el Granada ascendió a Primera División con un papel muy destacado del lateral izquierdo. Siqueira volvió a sentirse futbolista y esa buena campaña le sirvió para recuperar la confianza perdida en Italia.

Esa temporada en Segunda división le sirvió de impulso para la siguiente, en Primera división, consolidarse. En la máxima categoría el brasileño no se amilana y se convierte en el jugador a seguir del conjunto nazarí. Siqueira no sólo destaca por su faceta defensiva sino también por la goleadora, ya que consiguió anotar seis goles en Liga y uno en Copa del Rey, lo que le sirve para que la afición del Granada le apode de manera cariñosa “Sique gol”.

La siguiente temporada no le faltan novias para salir del Granada, sobre todo llamaron con mucha insistencia a su puerta equipos como Valencia y Benfica, pero el lateral izquierdo decide renovar por el equipo andaluz hasta el 2017. Con este gesto Siqueira quiere agradecer al Granada su apuesta por él cuando peor estaba en Italia dos campañas atrás.

Esa temporada,2012/2013, el brasileño vuelve a erigirse en la figura a seguir del Granada al volver a destacar tanto en defensa como en ataque. Esa campaña además sigue con su racha goleadora y vuelve anotar seis tantos en Liga. Después de esa gran temporada el Granada ya no puede retenerle más campaña y le vende ese verano al Benfica.

Para Siqueira esos años en la ciudad nazarí fueron muy especiales, por lo que el lateral izquierdo en más de una ocasión confesó que “tengo un cariño enorme por la ciudad porque fui muy feliz allí. Tengo un respeto y un cariño enorme por el Granada”.

Este sábado Siqueira tendrá sentimientos encontrados frente al equipo andaluz.