Una temporada con final feliz. Momentos buenos y no tan buenos. A continuación se muestra el 1x1 de los jugadores que han participado en este año histórico para el club romano y que, a buen seguro, será muy difícil de olvidar para muchos aficionados:

Manu: el portero de las grandes citas. A sus 41 años y en su tercera etapa en el club romano ha logrado cuajar una gran temporada a pasar de las varias lesiones sufridas en la temporada. Jugador muy querido por la afición.

Sebas Gil: la joven realidad. El guardameta zarceño sigue con su progresión ascendente en el fútbol extremeño y ya no es una promesa, es una realidad. Ha alternado la titularidad en muchos partidos con Manu y tiene un futuro prometedor.

Jhony: el capitán todoterreno. Es el jugador con más minutos de la plantilla, un fijo en las alineaciones de Ángel Alcázar. El lateral izquierdo es suyo y solo suyo. Muy regular durante toda la temporada, siendo partícipe en algunos goles importantes. Con esta completa su cuarta temporada en el club romano.

Jose Carlos: cumplidor. Bien en defensa pero poco participativo en ataque. El lateral valenciano ha jugado prácticamente todos los partidos importantes de la temporada hasta su lesión en Azuaga que le hizo perder ritmo respecto a sus compañeros, privándole así de jugar la liguilla de ascenso.

Mansilla: el jefe de la zaga romana. Otro fijo en las alineaciones de Alcázar. Irregular en algunos partidos de la temporada pero nadie le ha discutido su puesto en el centro de la defensa. Uno de los jugadores preferidos de la afición a la que tan bien tiene acostumbrada con sus “Mansillazos”.

Paco Borrego: imperial.  Uno de los mejores de la temporada. Seguro y difícil de superar en el centro de la zaga romana. Tras el partido de Santa Amalia parecía haber perdido la titularidad pero acabó la temporada en un gran estado de forma y sobre todo con un partidazo en Laredo.

F.Loaisa: jugador con pocos minutos. El central de Talavera no ha disputado todos los partidos que a él le hubiese gustado, aunque siempre que salía daba la talla. Por delante suya estaban Mansilla, P.Borrego e incluso Javi Chino. Jugador joven con futuro por delante.

Borja Romero: rápido y ofensivo. Uno de los mejores fichajes invernales del club. Lateral joven que ha terminado la temporada como titular y a buen nivel. Procedente del Lucena, ha cuajado una notable actuación en la mitad de la temporada que ha estado en el conjunto romano.

Javi Chino: un pilar fundamental. Situado por delante de los centrales, todos los balones que rondaban por allí eran suyos, ha sido el general del medio del campo durante la temporada. Aunque no terminó a un gran nivel debido a una lesión, en el último partido en Laredo se volvió a ver al Javi Chino “centurión” de toda la temporada.

Santi Amaro: intermitente durante la temporada. El montijano no ha sido muy habitual en los onces del técnico romano pero acabó la temporada siendo titular en el partido más importante en los últimos dos años realizando un buen partido. Se esperaba más del veterano mediocentro extremeño.

Dani Alonso: calidad fugaz en el centro del campo. El de Ponferrada comenzó sin jugar la temporada y poco a poco fue entrando en el equipo, hasta que tras la lesión de Troiteiro se convirtió en un fijo en el once. Jugador con mucha calidad pero irregular durante algunos tramos de la temporada. Para el recuerdo el 1-2 que anotó frente al Laredo asegurando el ascenso y llevando la locura a la grada romana.

Iván Matas: juventud y seguridad. El mediocentro llegó a Mérida en el mercado de invierno procedente del Real Avilés y ha ido sumando minutos de manera irregular. Destacar su último partido frente al Laredo en el Romano en el que fue la sorpresa en el once de Alcázar y cumplió, realizando un gran partido a pesar de su expulsión.

Borja: el timón del Mérida AD, el que hace jugar al equipo. A sus 23 ha tenido la responsabilidad de hacer jugar al equipo en el que lleva jugando desde temprana edad y ha cumplido con esa labor a la perfección. No es una de las revelaciones de la temporada porque ya es una realidad, es un gran jugador que el Mérida aseguró para las próximas temporadas.

Troiteiro: el infortunio romano. El 10 del Mérida disputó una buena primera vuelta y cuando estaba en uno de los mejores momentos de la temporada sufrió una lesión que le apartó de los terrenos de juegos, varios meses, hasta poder disputar solo 15 minutos en casa frente al Laredo. Eso sí, para el recuerdo será la abrumadora ovación que se llevó por parte de casi 12.000 espectadores en el Romano.

Cristo: siempre importante. A pesar de no ser su mejor temporada, el de Pueblonuevo empezó la liga como titular indiscutible, hasta que avanzada la competición fue desapareciendo de los onces de Alcázar. Aun así, terminó siendo titular y en un gran momento de forma que le sirvió para acabar jugando los dos partidos de liguilla siendo muy importante en ellos.

Joaqui Flores: velocidad, físico y gol. Gran temporada la que ha realizado el pacense con 15 goles y algunos de ellos para el recuerdo. Sin ir más lejos el importante y valioso 0-1 frente al Laredo que bien vale un ascenso. Uno de los jugadores más peligrosos para las defensas rivales a las que el Mérida se ha enfrentado esta temporada. Joaqui es sinónimo de peligro.

Jorge Caballero: el desborde y el desequilibrio romano. Otra temporada más y otra temporada que se supera Jorge Caballero. Aunque casi siempre salía desde el banquillo ha sido un jugador importante para sumar puntos muy difíciles y desatascar partidos. Para el recuerdo la rabona tras una cola de vaca a varios defensas del Hernán Cortés para que Perera solo la empujara a gol. El futuro es suyo.

Carrasco: de más a menos. Llegó en el mercado invernal y su polivalencia le hizo disputar varios encuentros tanto en el medio como en la defensa. Se afianzó en el once del equipo hasta que su fallo frente al Extremadura le hizo desaparecer de los esquemas iniciales. En Laredo el equipo notó su entrada en el partido y el centro del campo estuvo más controlado y seguro.

Jesús Perera: el matador romano. A sus 35 años no llegaba a Mérida para retirarse y lo ha demostrado con sus goles,  con sus 23 goles que le han hecho ser el pichichi del grupo XIV en Tercera División. No solo goles, Jesús Perera ha sido de lo mejor de la temporada del Mérida, bajando al centro del campo,  haciendo jugar y asistiendo a sus compañeros. El mejor fichaje de la temporada.

Toni: el goleador silencioso. El apodo de “Tonigol” lo tiene por algo y ese algo es el gol. 18 dianas ha logrado en esta campaña el delantero cacereño y lo ha hecho sin hacer ruido, en muchos partidos tocando tres balones y marcando dos goles. Es destacable la gran segunda vuelta que ha realizado, marcando pero también asistiendo. Así es Toni y así será siempre.

David Camps: el revulsivo. El delantero de Menorca ha sido el agitador del Mérida junto con Jorge Caballero cuando los partidos estaban atascados. Con 17 goles en 1.270 minutos Camps ha cumplido con las expectativas que se tenían de él en su primer año. Jugador con gol, luchador y muy querido por la afición por sus importantes goles, entre otros, los dos al CD Badajoz.

Ángel Alcázar: el capitán de la nave. El entrenador romano ha cumplido con creces junto con su cuerpo técnico con los objetivos establecidos en la temporada. Ha hecho campeón al equipo y ha ascendido a la primera de cambio en los playoffs, por lo tanto, más que notable la actuación del técnico que le ha servido para continuar al frente del club al menos una temporada más.

También han sido parte de esta amplia plantilla jugadores como Kimmo Hovi que llegó en el mercado de invierno y  solo ha disputado un minuto de juego; Nico Chietino, que abandonó el club dirección a Polonia en enero tras año y medio en el club; el canterano Álvaro Nevado, en busca de minutos a la UPP tras una vida entera ligada al club; y los lesionados el pasado año en playoff Parra y Regino que abandonaron el club dirección a Jerez y Fuente de Cantos respectivamente tras recuperarse de sus lesiones.