España encaraba el amistoso previo al partido clasificatorio en Borisov contra Bielorrusia con muchas novedades en la convocatoria. El morbo estuvo centrado en el muy posible encuentro sobre el terreno de juego de dos de tres de los porteros del Real Madrid. Casillas, Keylor Navas y el futurible portero del Manchester United David de Gea.

Morata fue el primero en abordar el terreno de juego, entre mucha expectación. El delantero de la Juventus fue, en los prolegómenos del partido, uno de los más aclamados entre el público. El jugador de moda y posible delantero fijo en el once de Del Bosque se verá cara a cara con el meta suplente de su ex equipo, Keylor Navas, que fue, junto con Bryan Ruiz, el mayor exponente de los ticos en el pasado Mundial.

La seleccion dirigida por el mítico Wanchope contó con muchos cambios en el once, respecto a lo visto en el pasado Mundial. Los ticos se han actualizado y ya solo quedan resquicios de la que fue la revelación de la competición, hace aproximadamente un año, encuadrados en el 'grupo de la muerte', con Inglaterra, Italia y Uruguay. El punta del conjunto bianconero empezó el partido en el banquillo, mientras que Alcácer lo hizo de inicio, reafirmándose como uno de los arietes más en forma con nombre español. San José formó con Koke en el centro del campo, un centro del campo muy polémico por la introducción del vasco. La novedad magna en la alineación del marqués Vicente Del Bosque acompañando en la banda y flamante fichaje del Barcelona fue Aleix Vidal.

Wanchope confió en el esquema que les dio la gloria en Rio de Janeiro

Los visitantes jugaron de entrada con tres de sus pilares: Bryan Ruiz, Campbell y Keylor, con las novedades de Venegas, un delantero con muy buen fútbol que ocupó la parcela de interior zurdo y el medio centro de contención David Guzmán, del Saprissa costarricense. Bryan Ruiz jugó esta vez de enganche, en vez de en banda, donde su potencia y explosividad fueron claves para el devenir de la seleccion centroamericana, no tanto para el Fulham. Campbell, extremo diestro del Villarreal, jugó de delantero.

David Guzmán y Venegas, principales novedades en el once costarricense

Paulo Wanchope volvió a confiar en el esquema que les dio la gloria en Rio de Janeiro. Autobús de cinco defensas en portería y celeridad a la contra. El partido lo estrenó Manolo 'El del bombo' y puso el balón en juego Fábregas y Alcácer. El combinado español comenzó muy fuerte, avasallando a una línea de cinco con Umaña, Júnior y Miller muy correctos. Joel Campbell ponía la dinamita en la ofensiva tica, empezando el ataque desde una posición muy retrasada. Campbell la recibió en la izquierda, se adentró por la banda de Carvajal y subió hasta el área, poniéndola para el nuevo de los visitantes, el delantero del Alajuelense, Venegas, que remata sin piedad a la portería de De Gea, convirtiendo el primero.

Dos minutos después era Fábregas quien sacaría la varita. Pase de la muerte para el delantero del Valencia, Paco Alcácer, que batió al portero madridista Keylor Navas. La selección española conseguía el impar pese a la férrea defensa costarricense, que estuvo adelantada en el momento de la genialidad del media punta catalán. El jugador blue volvía a intentarlo desde la diestra, muy encimado por Umaña, lo que propició el fallo.

Cesc llevó el timón de los de Del Bosque

El partido se tornó en un correcalles. Mucha velocidad por bandas y poco control en el medio. Koke lo intentaba desde lontananza, pero su disparo salió desviado por un jugador rival, a las manos de Keylor. La afición apretaba desde las gradas, coreando el nombre de su selección y alzando las banderas que cada espectador tenía en su asiento.

La tranquilidad imperó en los minutos siguientes a la escorrentía de goles. Cesc llevó el timón de los de Del Bosque, auspiciado en la retaguardia por un Koke muy activo y un genial Carvajal en banda, muy volcado al ataque. Aleix Vidal intervenía por primera vez en el encuentro con una asistencia medida a Alcácer, que no alcanzó a enganchar el cuero. Los centrocampistas tomaron mayor relevancia y se hicieron con la hegemonía de la contienda.

Costa Rica no volvió a acercarse por las inmediaciones defendidas por De Gea. Los jugadores visitantes con mayor dinamita en sus pies fueron Campbell y Venegas, ambos anulados por un inconmensurable Bernat. Fábregas volvió a las andadas, compinchándose con el nuevo, con el ex Sevilla, con Aleix Vidal, buscando su referencia en el punto de penalti. Jugada ensayada del míster salmantino.

La avanzadilla para España llegó desde las botas de Don Aleix Vidal. Jugón el de Valls, que la mete para Nolito, éste para Fábregas, que la introduce al fondo de las mallas. Tras dos años en blanco, Cesc lo volvía a hacer. España se ponía por delante a 15 minutos de la finalización del primer tiempo. Y seguía en profundidad el tarraconense, una y otra vez, sin encontrar la cabeza de ninguno de sus compañeros.

El jugador con más mordiente fue Aleix Vidal

Seguía Fábregas con el conejo y la chistera en la mano, metiendo pases al hueco para un Nolito muy activo que no encontraba acomodo sobre el césped. España se vio muy cómoda en la mitad de los primeros 45 minutos amén a la defensa adelantada de Costa Rica, a la que ganaban la espalda continuamente los jugadores locales. Ramos hacía titubear a la zaga de 'La Roja' con pases inciertos en una zona donde no puede caber la duda. Bartra, correctísimo durante todo el encuentro, se guardó de que el cancerbero mancuniano encajara más tantos.

Las hordas ticas venían comandadas por Campbell. Su zancada contrariaba a la selección española y su presión típica de un striker inglés ponía en apuros a una línea de atrás nada resuelta. El fuera de juego salvó varias veces al de Camas de no ser señalado como artífice de un desastre. El primer 'round' terminó con victoria rojigualda. A destacar la gran labor del extremo hoy convocado y alineado titular Aleix Vidal que con Fábregas en la posición de medio centro ofensivo, hacen una dupla de quilates. Lo peor fueron las dudas en defensa, aunque no empañaron la buena actuación del resto del equipo.

Abucheos y aplusos congregados

Una vez reanudado el encuentro, Aleix Vidal dejó su puesto a Vitolo. Abucheos y aplusos se congregaron en el Reino de León cuando Piqué saltó a la banda a calentar. El tercero estuvo servido en la testa de Ramos. De su cabeza salió un disparo certero que despejó Navas de manera excepcional. Nolito estaba ansioso de balón, ansioso de gol. Ramos se la puso en bandeja, pero Domagoj Vukov decretó posición antirreglamentaria. Campbell seguía gambeteando por banda diestra, su posición natural, pero el de Camas, exhuberante en el inicio, le frenó en seco.

Mala primera parte de Sergio Ramos que dio paso a una gran segunda mitad

Vitolo se marchaba por la zurda y Gamboa le paró cometiendo falta, amonestada con cartulina amarilla. La botó Fábregas con una parábola grandiosa, directa a las botas de Sergio Ramos, que una vez más, antes de ser sustituido, quiso su gol. Un gol que negaba Keylor Navas con otra parada de ensueño. Increíble el guardameta costarricense, realmente increible. En el minuto 56 llego el triple cambio: Nolito por Silva, Ramos por Piqué y Koke por Cazorla. Esta vez sobre el terreno de juego, Piqué fue duramente abucheado por un gran sector del público asistente.

El tercero lo tuvo Cazorla, a asistencia de Silva. Asistencia divina, solo propia de los mejores profesionales de este santo oficio, de espuela, hacia el hueco, como aquel de Óscar González para Roger que maravilló a los aficionados de Segunda, o aquel memorable de Guti para Benzema, aunque éste último, como el del media punta charro, terminó en gol. Vitolo se puso la capa de mago y tomó el relevo de un Cesc más descafeinado. El extremo del Sevilla arrancó los aplausos de propios y extraños. España, definitivamente, se erigía triunfante sobre el combinado de Paulo César Wanchope.

El triunvirato de diablillos volvía a la carga

Cubero salió por Guzmán, pivote por pivote. Muy reservón el ex del futbolista del Málaga, ahora preparador de la nacional constarricense. Silva estuvo a punto de jugar con el resultado, pero una vez más, el portero del Real Madrid, ex de Albacete y Levante, borró las esperanzas del de Arguineguín. La medular necesitaba de Xavi, necesitaba arrojo aliñado con tranquilidad, algo que San José no supo dar al equipo. Del Bosque decidió sustituirle por Busquets, buscando control y pausa en un centro del campo etéreo.

Pitos y vítores hacia Piqué dividieron el Reino de León

Fábregas-Alcácer-Carvajal, el triunvirato de diablillos volvía a la carga. En esta ocasión fue el lateral del Real Madrid quien intentaba batir a su compañero, pero, como ha sido tónica durante todo el encuentro, no lo consiguió. Resultado corto para 'La Roja', que se comió los ticos. Con uno solo arriba, los visitantes tenían la oportunidad de igualar la contienda. Fue Borges quien la bombeaba, dirección Vega, que la rompe, tanto que se dirigió a las gradas.

Alcácer tuvo el tercero, pero ese megatón que cuida las mallas de los soldados de blanco lo impidió por enésima vez. Isco volvía al verde, entre vítores. La gran atracción de la afición española. El malagueño la picaba por alto, intentando cerrar el marcador y sentenciar la pachanga, sin embargo, se le fue alto. Entró Saborío para cerrar el encuentro, por Borges. Wanchope agotaba todos sus cartuchos, sin resultado aparente. Isco y Vitolo volvían a caracolear, a desquiciar a la defensa visitante. Una pareja de garantías con mucho futuro en esta selección.

Pese a la condición de amistoso, los estertores del encuentro dejaron mucha brega entre ambos conjuntos. Los locales querían el tercero y los visitantes el empate. Ni una cosa ni la otra. La primera toma de contacto termina con victoria, con muy buenas sensaciones, aunque la falta de acierto sigue siendo la tarea pendiente de un combinado que no encuentra un estilo definido.

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Fotografías: Bibiana Peón | VAVEL.com