El nuevo portero del Espanyol, Francesco Bardi, se estrenó ayer con la zamarra blanquiazul en el empate a 0 ante el Reading. El italiano jugó los primeros 45 minutos, en los que no tuvo ningún tipo de complicación. Y es que el portero, que salió de titular, tuvo que ser testigo del peor partido, hasta la fecha, de su equipo en esta pretemporada. En un encuentro bastante duro y sin apenas jugadas de ataque, Bardi tuvo su debut tranquilo, sin tener que coger muchas decisiones y sin casi ser reclamado durante los 45 minutos que jugó. Tan tranquilo fue su puesta en largo, que la jugada de más peligro que recibió fue un disparo desviado por parte de Blackman. Más allá de esta jugada, ya no vió aproximación a su portería. 

Por lo tanto, el partido de ayer no sirvió para ver las características del jugador y la expectación para ver que depara este portero sigue entre la afición espanyolista. Bardi podría tener una nueva oportunidad de demostrar su potencial esta misma tarde en el partido ante el Southampton, si Sergio González decide darle minutos. Si hoy no jugara, su próxima aparición seria el próximo 9 de agosto, en la que puede ser una prueba de fuego, ya que ese día se juega el "Ciutat de Barcelona" ante el Betis, en la que es la presentación del Espanyol enfrente de su afición y el que será el primer contacto entre aficionados periquitos y el nuevo portero italiano. 

Francesco Bardi se incorporó hace una semana al Espanyol cedido con opción de compra por parte del Inter de Milán. El jugador italiano de 23 años, está llamado a ser uno de los recambios de cara al futuro de la selección italiana, y su condición de portero titular de la sub-21 italiana lo resalta aún más. Propiedad del Inter, ha ido de cesión en cesión en equipos como el Livorno o el Chievo Verona, y este año defenderá la meta perica.