Si bien es cierto que el cuadro tarraconsense terminó con 30 goles en contra al finalizar la liga regular, siete los recibió en las tres últimas jornadas del campeonato liguero, una vez el Nàstic ya era campeón matemático tras ganarle a Huracán y con Tomeu bajo palos.

Reina terminó con 23 goles en 35 partidos, solamente por detrás del Cádiz, que había recibido 21 tantos en la misma fecha. Reina, portero indiscutible en el cuadro tarraconense desde que, a mediados de la temporada 2013/2014, a Tomeu se le impidiera jugar. El guardameta malagueño se ganó su titularidad y esta pasada temporada demostró por qué es un portero de superior categoría y por qué estuvo en Primera División.

Una línea defensiva de oro

Pero las paradas imposibles de Reina no fueron lo único que llevó al Nàstic a subir a Segunda División. La línea defensiva tiene mucho que decir, y la defensa del Nàstic estuvo, en mucho partidos, rozando la excelencia.

Pablo Marí rindió a un gran nivel en el eje de la zaga y dio la victoria ante Lleida y Reus.

Tanto los centrales como los laterales rindieron a un buen nivel, anticipándose en numerosas ocasiones, llegando a balones imposibles y echando el cerrojo a su portería. Incluso se sobrepusieron a la larga baja de Gerard Valentín en el lateral derecho. El jugador catalán se lesionó en febrero y Vicente Moreno tuvo que reconfigurar la defensa y poner a Xisco Campos en el lateral y a Manolo Martínez como central.

El experimento le funcionó a la perfección al técnico valenciano. El Nàstic solamente recibió nueve goles desde las jornadas 23 hasta la 35 (momento en que se proclamó campeón del grupo 3 de Segunda División B). Sin embargo, todo apunta a que Gerard Valentín recupere el lateral derecho y Xisco Campos acompañe de nuevo a Pablo Marí en el eje de la zaga.

La línea defensiva fue la posición que menos cambios sufrió durante la temporada 2014/2015 dejando a un lado el cambio forzado por la lesión de Valentín. Un partido tras otro se iba repitiendo la misma alineación: Mossa en el lateral izquierdo, Xisco Campos y Pablo Marí como centrales y Gerard Valentin en el lateral derecho.

Solamente en algunos partidos esta ecuación cambiaba de parámetros, generalmente cuando algún jugador veía una cartulina roja o tenía que cumplir ciclo de amonestaciones. Ferran Giner sustituía a Mossa, Calavera a Gerard Valentín y Manolo Martínez cuando uno de los dos centrales cumplía sanción.

Hay un dicho en el fútbol que dice que "lo que funciona mejor no tocarlo", y Vicente Moreno se lo tomó al pie de la letra. Y es que cuando tuvo que hacer el cambio forzado por la lesión de Valentín, la zaga no se movió hasta el final de la temporada: Mossa en el lateral izquierdo, Pablo Marí y Manolo Martínez en el eje de la zaga y Xisco Campos en el lateral derecho.

Rocha, dueño y señor del mediocampo

De hecho, la zaga tarraconense acumulaba más minutos que nadie, dejando de lado a Reina. Todos ellos rondaban los 3000 minutos, es decir, 50 horas ininterrumpidas acumuladas. Todo ello se traduce en 34-35 partidos jugados durante la temporada regular.

Solo hay un jugador, que no forma parte de la defensa, que ha jugado tantos minutos: David Rocha. Uno de los héroes para la afición local. Uno de esos jugadores con el carisma suficiente como para enamorarte de su juego en el campo y causar simpatía a cualquier aficionado al fútbol fuera de él. Fue el rey de la celebración del ascenso, llevando la batuta igual que lo hace en el verde.

Rocha se encargó de desencallar al Nàstic en los primeros encuentros de liga.

De hecho, las primeras victorias del Nàstic fueron gracias a él. No se sabe si por destino o casualidad pero Rocha anotaba el gol de la victoria en el descuento. Lo hizo en L'Hospitalet, lo hizo en Valencia y lo volvió a repetir en casa ante el Alcoyano. Seis puntos que, quizás, hubieran significado algo totalmente distinto a final de temporada.

Un juego basado en cuidar el balón, con toques de una calidad superior a Segunda B. Uno de los jugadores que más sufrió durante la temporada y que más lo hizo tras el cruel desenlace en Llagostera en junio de 2014. David Rocha, indiscutible para Vicente Moreno, también jugó casi la totalidad de la liga regular.

Jugador Posición Partidos disputados Minutos jugados
Manolo Reina Portero 35 3150
Pablo Marí Central 35 3066
Mossa Lateral izquierdo 34 2991
Xisco Campos Central/Lat. derecho 33 2967
David Rocha Centrocampista 34 2919

Todos ellos han demostrado que tienen una calidad superior a la Segunda División B. Algunos ya lo demostraron la temporada anterior consiguiendo las 11 victorias consecutivas y quedándose a un solo gol del ascenso. Esta temporada han demostrado ser el mejor equipo del grupo 3 y mostrarse insuperables en defensa.

El Nàstic dejó la portería a cero en 19 de los 38 encuentros, recibiendo 30 tantos en total, 23 hasta la jornada 35. Los de Vicente Moreno fueron muy superiores a sus rivales, teniendo la mejor plantilla del grupo y jugando un juego muy vistoso, con numerosos detalles técnicos.

El Nou Estadi volvió a disfrutar de su equipo. Tarragona ha recuperado la ilusión por el Nàstic que se perdió durante las travesías en Segunda División en las que el Nàstic se salvaba en la última jornada. Una ilusión que pareció desaparecer del todo cuando el conjunto catalán, entrenado por aquel entonces por Jorge D'Alessandro, perdió la categoría en una temporada para olvidar.

Imagen: Gimnàstic de Tarragona.

Tres años han pasado para volver a ver a niños orgullosos de su equipo por la ciudad. Tres años han pasado para volver a ver un Nou Estadi hasta la bandera, coreando el nombre del equipo, cantando el himno y celebrando, nueve años después, un ascenso de categoría.

El duro inicio de temporada

Sin embargo, el Nàstic encara una nueva categoría con todo lo que ello significa: ser candidato al descenso desde la primera jornada, ser la cenicienta de la liga, adaptarse rápido a la nueva categoría... Etiquetas que tiene que quitarse el cuadro de Vicente Moreno rápidamente si no quiere verse en una temporada difícil.

El técnico valenciano tendrá el reto de configurar una plantilla en la que se está conservando la columna vertebral que consiguió el ascenso. Una zaga de oro, un centro del campo bien controlado por Rocha, y por otros jugadores que pueden aportar calidad como Emaná, Gal Arael y Sergio Tejera.

La incógnita está en el ataque. El Nàstic lleva años sin tener un nueve de garantías que se dedique a anotar goles. Rayco hizo 17 dianas la temporada pasada pero faltará ver si es suficiente con Álex López y Naranjo, nuevas incorporaciones. La pretemporada está dejando buen sabor de boca en el seno del Nàstic, pero lo bueno, lo de verdad, empieza el 23 de agosto.

Rayco hizo 17 dianas la temporada pasada.