El Nàstic de Tarragona se ha afiliado a la épica en su retorno a la Segunda División. Si la pasada jornada remontaron en poco más de cinco minutos y con un jugador menos para salvar un punto, este domingo los granas se impusieron por 1-2 al CD Tenerife en el Heliodoro Rodríguez López. Después de una primera mitad sin ocasiones y aburrida, los locales marcaron aprovechando un grave error defensivo de Marí. El valenciano se desquitó en el 65' empatando y Jean Luc culminó la remontada en el 84'. En ambos casos, asistencias de Ferran Giner, que compite con un rocoso Xavi Molina por el 'título' de mejor jugador grana del partido.

Así las cosas, el Tenerife comienza a necesitar puntos, pues cae a la última plaza de la Liga Adelante sin puntos (al igual que Llagostera y Athletic Club B). Por contra, el Nàstic, con un toque de suerte y mucha fe, toma aire y se alza hasta la cuarta plaza, empatado con el quinto y el sexto (Real Zaragoza y CD Lugo respectivamente).

Aburrida igualdad

En líneas generales, la primera parte fue tan igualada como aburrida. Tenerife y Nàstic se repartieron por fases el control del balón, y ninguno de los dos equipos fue capaz de crear ninguna ocasión de gol clara en los primeros cuarenta y cinco minutos.

El primer conjunto en buscar la portería contraria fue el Nàstic de Tarragona. Fue una falta sacada desde la izquierda del ataque visitante que acabó siendo rechazada a córner por la zaga canaria. Los catalanes tuvieron otro saque de esquina a su favor, y no fue hasta el 15' cuando los locales se acercaron por primera vez a la meta defendida por Manolo Reina: precisamente, con un córner sin peligro.

En la primera mitad no hubo apenas ocasiones. (Imagen: LaLiga).

Ese córner, aunque no trajo problemas a la zaga tarraconense, sí despertó un poco a los isleños. Por ejemplo, en el 19', un centro desde la derecha fue rematado en el área por Abel. Su disparo se marchó por línea de fondo cerca del palo derecha de Reina. Con el ecuador de la primera parte ya superada los locales disponían de una falta peligrosa, pero Aitor Sanz erró y su chut topó en la barrera (27').

Sin goles al descanso

Otra falta, esta vez en el lado izquierdo, fue centrada por Abel donde no había ningún jugador local; Mossa rechazó (32'). En esos minutos los hombres de Vicente Moreno estaban teniendo más el peso del partido, y con estas dos faltas los tinerfeños volvieron a despertar. Aun así, la última ocasión fue visitante: falta sacada por Tejera desde la izquierda del ataque que Xavi Molina no llegó a cabezear en el área pequeña por muy poco.

En la segunda llegaron los goles

Corría el tercer minuto de la segunda mitad cuando llegó el primer gol del partido. Sin haber siquiera disparado entre los tres palos, los canarios inauguraron el marcador. El tanto llegó después de un error del central grana Pablo Marí. Un error que aprovechó el más hábil, Lozano, para hacer el 1-0 batiendo con una vaselina a un adelantado Manolo Reina.

Otra remontada grana

Después del tanto del Tenerife, Vicente Moreno buscó una rápida reacción y dio entrada a Emaná, algo que pareció revolucionar el partido. Aun así, los locales estaban más reforzados, y en el 61' pudieron haber ampliado distancias: Suso se quedó cara a cara con Reina, pero Pablo Marí, providencial para los intereses catalanes, tocó lo justo el balón para rechazar a córner. En ese saque de esquina la afición tinerfeña vio cómo el balón se paseaba sin que ninguno de sus jugadores lo consiguiera rematar al fondo de la red antes de la intervención del portero visitante.

Parecía que el 2-0 estaba más cerca que el 1-1, pero todo cambió en el 64'. David Rocha activó a los catalanes con un chut desde la frontal que un defensor local desvió a córner. El saque de esquina no fue, en primera instancia, útil para el Nàstic, pero en el rechace Ferran Giner centró al área, Rayco peinó y Marí remató al fondo de la red para devolver el empate al electrónico del Helidoro Rodríguez López.

El partido estaba más abierto que nunca. Por ejemplo, en el 78' un buen centro de Omar tocó césped en el mismo punto de penalti, donde se encontraban los dos delanteros locales, pero Xavi Molina tocó con el talón para dejar atrás el esférico y salvar los intereses visitantes. Era ya el 84' cuando se desató la euforia en el banquillo del Nàstic, pues los tarraconenses obraron la remontada: otra vez centro desde la banda izquierda de Ferran Giner que, desde el área pequeña, Jean Luc cabeceó para conseguir la remontada, para hacer un 1-2 que no se movería del marcador.

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Sobre el autor
Daniel Gallego
apasionado del deporte y del fútbol en particular. Consumidor compulsivo de series, películas, libros y música. Coordinador del Gimnàstic de Tarragona y colaborador puntual en la sección de Política.