Victoria, remontada y buen juego del Athletic. Los rojiblancos se reencontraron con la victoria en San Mamés ante un rival de Champions y respiran en la clasificación de cara al parón por selecciones que habrá en las próximas semanas, antes de la complicada visita a Riazor.

Los leones afrontan tras el parón un calendario con menos nombre, pero con igual dificultad, midiéndose a tras conjuntos que se encuentran en un buen estado de forma y de moral como son Deportivo, Sporting y Betis, además del vital doble enfrentamiento frente al Partizan en la UEFA Europa League.

Recuperar efectivos

Con el paso de las semanas, Valverde va recuperando jugadores lesionados. El técnico de Viandar de Vera ha tendido que ir acoplando diferentes piezas para suplir las bajas durante las pasadas semanas. El pasado domingo, con la vuelta al once titular de Williams, se vio el once más parecido al titular de los últimos meses.

El regreso de Williams, la vuelta a su nivel de Susaeta, y los inamovibles Laporte, Aduriz y Raúl García. El Athletic recupera efectivos, y con ello, sensaciones, que le sirvieron para llevarse el partido antes el Valencia, pese a empezar por detrás en el marcado.

Omnipresente Beñat

De nuevo, y como viene siendo costumbre, Beñat brilló con luz propia en el centro del campo del Athletic. Robando balones, asistiendo, iniciando juego, y cortándolo, el de Igorre está en un momento espectacular de forma y es el faro del Athletic en estos instantes, llegando al extremo de apagarse el equipo cuando él se apaga.

El de Igorre comenzó el choque robando la pelota y provocando una ocasión, y lo acabó cortando la pelota en la jugada del 3-1, como se aprecia en la imagen, y manteniendo la posesión para que los de Nuno no se metieran en el choque en los últimos 20 minutos, cerrando así de nuevo un gran partido para los de Valverde.

La capacidad de mezclar

Si hay algo bueno que tiene el Athletic, como ya se ha comentado en otras ocasiones, es el balón parado, y el juego aéreo, y en el choque frente al Valencia se volvió a ver. Cuando peor lo estaba pasando el equipo rojiblanco, llego el balón parado, un saque de esquina botado por Beñat que, tras prolongar mal Negredo acabó en la red tras cabezazo de Laporte.

En el segundo tiempo se mostró una nueva faceta de los leones. Los de Valverde son capaces de mezclar juego por arriba y juego por abajo, y así hicieron dos goles más. El primero, de la vieja escuela de San Mamés, saque en largo de Iraizoz, prolongación de Raúl García y gol de Susaeta tras asistencia de Aduriz.

Y no quedó ahí la cosa, tras el robo de Beñat mostrado anteriormente, el Athletic hizo un gol por abajo, Suaseta y Raúl García combinaron, el segundo hizo una gran jugada personal y asistió a Aduriz que definió como los ángeles, para poner el definitivo 3-1 que cerraba el choque.

Los rojiblancos realizaron un buen partido, y si siguen siendo capaces de mezclar correctamente estas dos facetas del juego, jugar por arriba y por abajo, habrá Athletic para rato.