Si hay un portero en la liga española capaz de cambiar halagos por críticas y de alternar actuaciones magistrales con fallos estrepitosos, ese es Carlos Kameni. El meta camerunés del Málaga se enfrenta este sábado al Valencia y lo hace en uno de los mejores momentos de su carrera. A medida que se acerca el invierno de su carrera futbolística, el otrora sucesor de N´Kono ha ido añadiendo por fin esa regularidad que siempre le ha faltado para dar ese salto definitivo, hoy sí, Kameni es una garantía.

Llegó al Espanyol con la vitola de ser el sucesor de N´Kono, una percha difícil de asumir para un portero de apenas 20 años que procedía del modesto Le Havre francés. Allí, en el país del gallo, Kameni no había terminado de despuntar y solo en una cesión al Saint Etienne logró los minutos que necesitaba para continuar una progresión que en Europa se remonta a 1999, año en el que aterriza en Suiza para jugar en las filas del Sion.

En el Espanyol debuta en 2004 y tarda muy poco en ganarse a la afición perica y a empezar a llamar la atención de ojeadores internacionales. A pesar de ello, decide continuar en la ciudad condal y ese mismo verano llega Gorka Iraizoz, con el que competirá durante toda la temporada. Finalmente Kameni gana la partida e inicia su tercera temporada como perico afianzado de titular. Se hace indiscutible hasta la temporada 2010/2011, el teórico ocaso de Kameni.

"Solo Pochettino sabe por qué me he ido"

Son las palabras de Carlos Kameni el día de su despedida del Espanyol. Por la puerta de atrás y con un enigma respecto a su futuro. Renegado al ostracismo del banquillo, pero dejando a las claras que su relación con el técnico argentino es la causa de su salida. 

Kameni, entonces, decide dar un paso atrás a nivel personal para dar otro delante a nivel colectivo. Ficha por el Málaga, que le expone un proyecto ambicioso gracias a la llegada del jeque. Aparece como suplente de Willy Caballero y espera paciente su oportunidad durante tres años y en el verano de 2014 le aparece en forma de caramelo envenenado. Willy se marcha al Manchester City y llega arropado por su gran mundial el 'Memo' Ochoa.

Ni corto ni perezoso, Kameni le gana la partida desde el minuto uno. Reflejos felinos y madurez adquirida entre los palos y sobre el banquillo, el ex del Espanyol empieza un nuevo ascenso para demostrar que su carrera cayó de forma prematura y que lo bajado se puede volver a subir, ¡Vaya si se puede subir! Kameni vuelve a ser el de antaño, el hombre capaz de silenciar al Bernabéu y el Camp Nou. Ahora viene a Valencia.

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