Victoria holgada y cómoda de los rojiblancos ante el FC Astana. El equipo de Simeone fue superior sin dar demasiado y goleó al equipo kazajo. Saúl abrió el marcador y Jackson doblaba el marcador poco después para hacer el partido un paseo antes de la media hora. Óliver con otro golazo y otro más en propia portería cerró el marcador en un partido liderado por un Carrasco en plan estrella.

Jackson, por fin, pero con 'peros'

Llegaba el equipo kazajo con muchas bajas, por decisión técnica, pensando el futuro en su competición liguera. La remota opción, de la cual eran conscientes, de ganar en el Calderón hizo que el equipo llegara al partido ante los colchoneros con tan solo cuatro suplentes. Esa predisposición se vio en los primeros minutos, y a pesar de la valentía en la combinación, Griezmann y Jackson avisaron al equipo amarillo con dos ocasiones antes de los cinco minutos. Siqueira y Carrasco pusieron la velocidad en estos primeros compases, en un partido que pintaba muy plácido para los de Simeone. Tan solo el capitán Kathévoama desde la parte izquierda intentaba inquietar a Juanfran y a Oblak.

El Atlético se acomodó y se conformó con una marcha menos y el ímpetu de los menos habituales en su condición de necesitados en minutos. Las ocasiones llegarían ahora en saques de esquinas. Dos remates de los centrales, precedieron a un tercero que acabaría rematando de chilena Griezmann en lo que a punto estuvo de ser otro gran gol a la vitrina del francés. El Atleti combinaba bien. Juanfran-Gabi, Siqueira-Carrasco,… pero el gol no llegaba. El colombiano Jackson Martínez no llegaría a un balón dentro del área y comenzarían los más prematuros murmullos mientras bajaba el frio al Calderón.

Tras otro intento más del francés al segundo palo de un saque de esquina, llegaría el gol a los veintidós minutos. Tras varios avisos desde el banderín, Saúl abría el marcador con un buen remate de tacón tras un segundo centro de Carrasco. El canterano siempre dispuesto al buen hacer en este equipo, ponía otro ladrillo en su construcción de gran jugador. El gol liberaría al Atleti y a Jackson. Tras marcar uno en fuera de juego, vería puerta poco después. Cerca de la media hora, el colombiano se revolvía en el área y tras un flojo disparo se vio ayudado por el meta Eric para hacer el segundo. El ex del Oporto vio la luz.

Los de Simeone ya dominaban el partido sobriamente en el marcador y el partido se durmió, las llegadas eran un trámite de la superioridad. Las anticipaciones fueron una constante en la defensa rojiblanca y jugadores como Siqueira, Gabi o Juanfran se hincharon a ganar protagonismo. En una de esas Juanfran puso un gran balón a Jackson, que a pesar del gol no supo desquitarse en más ocasiones. El meta Eric, que alternó arena y cal, esta vez se lució ante el colombiano. Poquito más en el primer acto, donde con poco el Atlético pudo doblegar al equipo de Stoilov.

Carrasco 'on fire'

Comenzaba la segunda parte con la novedad de Óliver en el lugar de Tiago. Descanso para el portugués en un partido que pintaba como menos imprescindible. En su lugar el canterano, y un marco perfecto para él. Saúl se había alzado como líder en la creación, muy desatado. Óliver se coló entre líneas, y un Siqueira muy intrépido, pero sin finalización de jugadas no hacían sombra a Carrasco en la primera hora de juego. El belga fue la salsa de un encuentro frío. Yannik lo intentó y lo intentó, y varias veces levantó las onomatopeyas más gustosas del Calderón. Está ‘in crescendo’.

El propio extremo belga, justo después del cambio de Griezmann, realizó otra gran jugada solo frenada por la parada del meta visitante. Jackson pudo rematar en segunda instancia pero el balón se marchó al lateral. Sería Óliver el que marcara el ansiado tercer gol. Contra de libro tirada y previamente armada, por un gran Gabi que cede en el área al talentoso media punta que con un toque sutil y una gran vaselina ponía el tercero. No tardó en reaccionar el Astana, que hizo lucir a Oblak por primera vez en el 65 ante un gran disparo kazajo.

Se divertían entre los huecos visitantes los jugadores de más talento del Atleti. Óliver Torres pudo marcar el cuarto tras una gran jugada con Carrasco. El partido estaba para ellos, y capitaneados por Gabi y Saúl la magia se producía en tres cuartos. A pesar de dormirse cada vez más el ataque, el Niño pudo hacer su golito en una gran carrera pero Eric frenó su proyecto de vaselina. El orgullo kazajo siempre venía de las botas de Kéthévoama, que fue el único en hacer trabajar a Oblak y de nuevo hizo ir al suelo al meta esloveno.

El partido iría muriendo en la posesión rojiblanca, las ocasiones erradas y los despejes a donde podían del Astana. Finalmente, la enésima galopada de Juanfran, tras un gran pase interior, daba como resultado el colofón del cuarto gol. Torres esperaba el envío de Juanfran pero sería un defensa en su propia portería quien enviara el balón al fondo de la red. Era el cuarto en el 90 y el final a un partido fácil para los de Simeone.