Mucho ha cambiado el panorama en las tres últimas temporadas. Hace cerca de dos años y medio, con la Liga 2012/13 llegando a su fin, tenía lugar en Riazor un derbi entre dos equipos prácticamente hundidos. Deportivo y Celta, último y penúltimo respectivamente, protagonizaban un encuentro de vital necesidad para mantener viva la esperanza de permanecer en la élite y no consumar un nuevo descenso a la Liga Adelante.

Dépor y Celta se enfrentaron en 2013 siendo último y penúltimo respectivamente

Los celestes se distanciaban seis puntos de su rival pero, aun así, el Zaragoza —decimoséptimo clasificado— se encontraba tres por encima del equipo vigués. La necesidad imperiosa de ganar llevó al Deportivo a alzarse como vencedor de O Noso Derbi por tres goles a uno en un partido marcado por la alta tensión, que llevó a Iago Aspas a propinar un cabezazo a Marchena que le costaría la expulsión y el abucheo de los seguidores blanquiazules. Empezaba de este modo la "resurrección" de un conjunto dirigido por Fernando Vázquez al que, antes de disputarse el clásico gallego, muchos daban por desahuciado. Por su parte, el Celta se hundía aún más y la salvación parecía cada vez más complicada.

No obstante, aquella temporada sería finalmente el equipo vigués el que mantendría la categoría en la última jornada gracias a dos goles que la afición celtiña nunca olvidará: uno de Natxo Insa en Balaídos y otro de Antoine Griezmann en Riazor, condenando al Deportivo a un nuevo descenso.

Con los focos puestos en Riazor

La situación actual nada tiene que ver. El Celta ha conseguido asentarse sobre suelo firme en Primera y el Deportivo progresa adecuadamente desde su último retorno a la élite. Los dos enfrentamientos que tuvieron lugar la pasada campaña entre los colosos del fútbol gallego no dejaron indiferente a nadie. Ambos partidos se vivieron con mucha intensidad e igualdad, aunque finalmente los célticos vencieron tanto en Balaídos como en Riazor.

Ahora ambos equipos llegan a O Noso Derbi en un momento de plenitud. El Celta ha permanecido las once primeras jornadas en 'zona Champions' y ha logrado plantar cara a los más grandes. Por su parte, el Deportivo es noveno pero ronda los puestos europeos. Tanto celestes como blanquiazules se caracterizan por defender una propuesta alegre y ofensiva. Todo parece indicar que va a ser un partido bonito y con gran intensidad entre dos equipos que tratan muy bien el balón, con el aliciente de tratarse del clásico gallego, un encuentro del que ninguno quiere salir perdedor. Riazor se prepara para acoger uno de los partidos más atractivos del panorama nacional. Los focos están puestos sobre A Coruña ante el que podría ser el encuentro más destacable de la jornada si no se viese eclipsado por el Clásico entre Real Madrid y Barcelona.

De los Djalminha y Mostovoi a Lucas Pérez, Aspas y compañía

El buen momento en el que vigueses y coruñeses llegan a este partido invita a recordar tiempos pasados en que el derbi gallego era un auténtico duelo de colosos. El SúperDepor en el que destacaban Djalminha, Bebeto o Víctor Sánchez contra el EuroCelta, que contaba con jugadores de la talla de Mostovoi, Karpin y Berizzo. Aquellos enfrentamientos dejaron un sinfín de goles y anécdotas. Como dato, cabe destacar que durante nueve derbis consecutivos sólo uno de los dos equipos logró marcar en cada partido, mientras que el rival quedaba con la portería a cero. El balance final deja cinco victorias del Deportivo y cuatro del Celta.

Tanto coruñeses como vigueses cuentan ahora con nuevas estrellas del nivel de Lucas Pérez, Mosquera, Aspas o Nolito, que cogen el testigo de los Djalminha, Mostovoi y compañía. Curiosamente, los dos conjuntos son entrenados por ex jugadores que vivieron en primera persona el glorioso pasado del fútbol gallego: Víctor Sánchez del Amo y Eduardo 'Toto' Berizzo. Quizá sea demasiado pronto para comparar a ambos equipos en la actualidad con la época dorada que vivieron dos décadas atrás. Con todo, este partido no dejará indiferente a nadie.