Jaume Costa habló tras la finalización del partido con Movistar +, a pie de campo. El lateral zurdo tiró de sinceridad al hablar sobre su gol: "No meto gol ni al arcoíris, ha sido de coña", comentó entre risas Jaume.

Y es cierto, el lateral del Villarreal ha marcado tres goles en los 127 partidos que ha jugado con el Submarino AmarilloPero este gol vale un punto en un partido que empezaron perdiendo, y sitúan al Villarreal en puestos Champions.

El partido estaba llegando al final. Ambos equipos se encontraban con un jugador menos (el Eibar por la expulsión de Keko y el Villarreal por la lesión de Bonera) y el Submarino se negaba a bajar los brazos. Y a falta de cinco minutos llegó el tanto del empate.

Jaume Costa recibía el balón dentro del área y se plantó delante de Riesgo, portero del Eibar. El lateral zurdo tocó el esférico con la punta del pie, y el balón entró a cámara lenta y con suspense, golpeando primero en el palo y paseándose por la línea de gol. 

Tercer gol del lateral con el Villarreal

Este tanto ante el Eibar es el tercero que Jaume Costa marca con la camiseta del Villarreal, que la ha vestido en 127 partidos, por ahora. Y parece que este lateral está acostumbrado a hacer un gol por temporada.

Primero fue en la temporada 2013-2014. El Villarreal acababa de volver a Primera y luchaba por los puestos europeos. En la tarde del 10 de mayo de 2014, el Submarino recibió al Rayo Vallecano con el objetivo de certificar un puesto en la Europa League, y pasó por encima del conjunto madrileño (4-0). Marcaron Uche, Bruno Soriano, Jonathan Pereira y Jaume Costa, que se unió a la fiesta goleadorea al aprovechar un rechace del portero para marcar a puerta vacía.

Un año tuvo que pasar para que Jaume volviera a ver puerta con el Submarino. Se iba acabando la temporada 2014-2015, y el Villarreal tenía agarrada (pero no sentenciada) la sexta plaza de la Liga. El 2 de mayo de 2015, el Submarino visitaba Riazor para medirse ante el Deportivo. Jaume Costa adelantaría al Villarreal con uno de los goles de la temporada. Recibió el balón en la frontal y golpeó el balón con el empeine, que le dio un efecto endiablado, y el portero no pudo hacer nada para evitar el tanto. Borges marcaría el empate en la siguiente jugada, y el marcador no volvería a moverse.