Como si se tratara de un capricho del destino, el delantero del conjunto amarillo no podrá jugar ante su ex equipo el próximo fin de semana, ya que tras ver una nueva amarilla en Liga frente al Eibar el pasado domingo, acarrea una suspensión de un partido por acumulación de cartulinas amarillas.

Esta norma de suspensión, no permitirá que Soldado pueda volver a enfrentarse a su antiguo equipo ante su antigua afición. Aquella que tantas tardes le apoyó en el Coliseum Alfonso Pérez. El delantero groguet tendrá que esperar a la segunda vuelta de la Liga para poder enfrentarse a los azulones, aunque se jugará en casa. Con casi total seguridad, Roberto Soldado estaba ilusionado de poder enfrentarse al Getafe antes de que le mostraran la amarilla definitiva que le ha privado de estar el próximo fin de semana en el Coliseum.

Un jugador necesario para el gol

Las participaciones del delantero amarillo han sido de gran relevancia en lo que se ha jugado de temporada. Su fichaje en un primer momento generó algo de dudas en la afición amarilla, aunque después de los primeros partidos ligueros, nadie quedó insatisfecho con la actuación de Soldado. Desde el principio, se involucró con el equipo y estuvo a un gran nivel, sorprendiendo a casi todos por su rápida adaptación al nuevo equipo y a la vuelta al estilo de fútbol español que tanto dista del tradicional fútbol inglés que practicaba en su andadura en el Tottenham.

Los datos lo dicen todo: 5 goles entre Liga y Europa League, 5 asistencias también entre ambas competiciones y más de 1000 minutos disputados entre ambos torneos. Su buen inicio goleador en Liga le llegó a colocar incluso como pichichi en las primeras jornadas.  Estas estadísticas reflejan la importancia del delantero en el equipo castellonense, lo que le ha permitido desde un principio hacerse un hueco en el once titular, desplazando a jugadores de mucho talento como Samu García o Leo Baptistao.

El único dato que se le puede achacar a Soldado es la acumulación de tarjetas amarillas. Esas cinco tarjetas que lleva en Liga le han privado de disputar un partido importante el siguiente fin de semana. Algunas de las tarjetas recibidas fueron por protestar al árbitro, lo que desde algunos sectores ha sido comentado como algo evitable y a tener en cuenta por parte del jugador para evitar futuras suspensiones que vuelvan a impedir de nuevo la disputa de un partido importante. Un dato estadístico que refleja esto último es que Roberto Soldado, siendo delantero, acumula cinco tarjetas amarillas en lo que se ha disputado de Liga, mientras que Víctor Ruiz, defensa del Villarreal, solo ha visto dos cartulinas amarillas.

El fallido regreso al lugar en el que empezó todo

Sin olvidar su paso por el Real Madrid y por Osasuna, equipo en el que comenzó a despuntar y a llamar la atención de equipos grandes, su estancia en Getafe se define en gran parte como su etapa de impulso como futbolista.  Aunque solo estuvo dos temporadas en el conjunto madrileño, fue tiempo de sobra para que Soldado se posicionara como un delantero de referencia mundial. En su primer año, con Víctor Muñoz en el banquillo, se ganó el puesto de titular rápidamente y finalizó la temporada con 17 goles. En la temporada posterior, anotó 20 goles, en una temporada histórica para el club en la que gracias a las buenas actuaciones de Soldado, el equipo llegó a las semifinales coperas y se clasificó para la Europa League.

Por todo esto, Soldado ha demostrado ser un delantero que se gana casi siempre el puesto de titular en los que equipos en los que juega. Pese a una segunda temporada oscura en el Tottenham, el actual jugador amarillo resulta de gran ayuda a sus equipos para mantenerse en posiciones elevadas de la tabla, gracias a su habilidad para anotar y ser el referente goleador del equipo, especialmente en Liga.