La victoria del Real Madrid ante el Cádiz en la Copa del Rey quedará marcada por el ámbito extrafutbolístico más allá de lo que sucedió en el campo. Poco importan los dos goles de Isco, el buen partido de James y Marcos Llorente o el estreno de los mirlos blancos en competición con el primer equipo. Los focos estarán apuntando a otra dirección, aunque para Tejero y Lienhart la historia es bien diferente.

Puntos positivos en mitad de la chirigota

El zaguero austríaco recibía la llamada de Rafa Benítez en el minuto 78. Despojado del chándal de entrenamiento, el central del Castilla saltaba al campo en sustitución de James Rodríguez para situarse como carrilero diestro, en una demarcación que estrenaba en su primera participación con el primer equipo.

Dos de los puntales en defensa del Castilla de Zidane, Lienhart y Tejero, debutaron con el primer equipo ante el Cádiz

Phillip Lienhart llegó el pasado verano para reforzar el Juvenil A de Luis Miguel Ramis, y su progresión le ha llevado a ser considerado por Zidane como fundamental cuando las lesiones se lo han permitido, formando en el eje de la defensa siempre que ha estado a disposición del técnico galo para comandar la retaguardia merengue.

Minutos después, también en la segunda parte, otro mirlo blanco recibía la alternativa. Pepe le dejó su lugar en el campo a Álvaro Tejero, lateral polivalente de La Fábrica que está rindiendo a un nivel altísimo en esta campaña, y que también procede directo del Juvenil de Ramis. El futbolista de Madrid llegó a la cantera madridista en el año 2005 con apenas nueve años, y diez después sigue quemando etapas en la formación de un jugador en el que se tienen grandes esperanzas para esta campaña.

Ha jugado como central, lateral derecho e izquierdo en esta temporada, aunque su demarcación natural es el perfil zurdo de la defensa. A sus 19 años es otro de los indispensables para Zidane en el Castilla, y uno de los motivos que explican el buen rumbo. Apenas disputó cinco minutos - contando el añadido - pero guardará para siempre en su memoria la noche de Cádiz.

Marcos Llorente, referencia

Además de los dos mirlos anteriormente citados, otro jugador de la cantera vivió un segundo debut. Marcos Llorente ya había jugado minutos en Liga (23 en total entre dos partidos) pero frente al Cádiz, el madrileño estrenó titularidad. El centrocampista retrasó su posición natural al eje de la defensa para formar de inicio junto a Pepe en dicha demarcación que ya ha tenido que ocupar en algunos partidos de la campaña con el filial.

Durante el transcurso del choque, Llorente ocupó el doble pivote por los cambios junto a Casemiro, cuajando en cualquiera de las posiciones una actuación notable. En La Fábrica se le mira como un jugador de mucho futuro, y cada vez que se enfunda las botas el madrileño le da la razón a quiénes ven en él un hombre de carrera en el Madrid.