La derrota por dos goles a cero del Celta en La Rosaleda es fruto de sendas jugadas aisladas. El entrenador de los vigueses, Eduardo Berizzo, lamentó la "frustrante" forma en que su equipo encajó los dos tantos que propiciaron su segunda derrota consecutiva en Liga, como la forma en que "inclinó el partido en beneficio de nuestro rival". "Hasta ese momento, el partido era parejo", defendió el técnico argentino.
El Toto elogió la actitud de sus jugadores para buscar igualar un resultado adverso, poniendo como el mejor ejemplo el remate de Daniel Wass que se estrelló en el larguero. "Pudimos meternos en el partido, no lo logramos y con diez es más difícil", resumió, insistiendo en que el partido "era parejo" hasta que un excéltico, Charles, abrió la lata a los siete minutos de juego.
En la lectura que Berizzo hizo del partido, el entrenador del Celta reconoció que el Málaga "encontró su premio a balón parado", para después indicar que "luego tuvo ocasiones para incluso ampliar el marcador". Dejando lugar a la autocrítica, el Toto afirmó que "no ha sido un partido bueno" para los celestes, especialmente a la hora de defender las jugadas de estrategia. "Nuestro rival aprovechó toda nuestra distracción en el juego aéreo para marcar dos goles", dijo, explicando que el partido "después se complicó con diez".
"Hay que felicitar al Málaga, es justo vencedor"Eduardo Berizzo elogió delante de los periodistas a sus jugadores, destacando que "siempre se comportan dándolo todo". "Hoy no tuvimos un buen partido y nuestro rival sí; hay que felicitarles, son justos vencedores", aseguró el entrenador del cuadro vigués. Sobre la actuación del árbitro, Iñaki Vicandi Garrido, Berizzo eludió hacer valoraciones, ciñéndose a que "de los errores de los árbitros" no habla "nunca: ni cuando favorecen, ni cuando perjudican".
"Ni Rubén ni otros jugadores tuvieron una buena noche"El más señalado tras esta derrota es el meta Rubén Blanco, que volvió a ser titular por decisión técnica por delante de Sergio –que paró un penalti nada más saltar al césped–, después de ya haberlo hecho hace dos jornadas. El entrenador no quiso que el joven meta cargase con la responsabilidad de la derrota. "No ha sido una buena noche, ni la suya, ni la del equipo", defendió el Toto, recalcando que la mala actuación en el terreno de juego "fue de muchos otros futbolistas", a mayores de Rubén.
Berizzo concluyó reconociendo que "los errores se pagan", y reiteró que el Celta intentó buscar la igualada, "pero todo lo que pasaba en el partido favorecía a nuestro rival".