Se acabó un año de ensueño como el 2015 y la realidad golpeó primero al Atlético de Madrid Féminas. Las rojiblancas, que tenían la oportunidad de llegar a colocarse líderes, desaprovecharon la ocasión ante un Athletic Club muy crecido que no dio posibilidad alguna al club colchonero y le asestó una dura goleada por 3-0. Los dos primeros clasificados se enfrentaron en un partido de poder a poder pero la inspiración estuvo de parte del cojunto vasco, que con estos tres puntos se escapa manteniendo su liderato en solitario, aventajando en seis puntos al Atlético Féminas.

Ambos conjuntos estuvieron empatados a puntos durante casi todo el calendario liguero, pero en el último partido del año, el Atleti sucumbió contra el Levante, dónde se abrió una brecha de tres puntos que a día de hoy se ha acrecentado.

La falta de fortuna, un bache psicológico

El encuentro empezó con una gran igualdad durante los primeros minutos. El desequilibrio llegó cuando Erika, tras una jugada a balón parado, aprovechó en el minuto 20 un saque de esquina para colocar el primer gol en el marcador. El tanto fue un golpe psicológico para el Féminas, que comenzó a desinflarse. Cada jugada a balón parado de las bilbainas era peligro inminente para un Atleti que cada vez se veía más sobrepasado.

La balanza se decantó totalmente por las locales cuando Corres, al borde del final de la primera mitad, batió en un mano a mano a Lola Gallardo. Las visitantes se fueron al vestuario con un 0-2 en el descanso, de dónde volvieron con más ambición y ganas. Pero no fue suficiente.

En el que parecía ser el mejor momento de las colchoneras en el partido, llegó el tercer estruendo vasco. Corres, de nuevo, se encargaría de anotar el último tanto del partido en el minuto 61. Lo hizo con un remate desde el punto de penalti, remate que sentenció un encuentro del que las rojiblancas tienen mucho que aprender.

Una jornada para olvidar

Es el momento de pasar página y levantar cabeza, y no hay mejor ocasión que esta. El siguiente rival es el FC Barcelona, rival directo del Féminas. En dicho encuentro se verá si la imagen dada en Lezama ha sido un espejismo de desdicha o si, por el contrario, se puede comenzar a hablar de 'crisis' en el conjunto rojiblanco.