En 2001, Miku se fue de vacaciones a Valencia. El atacante jugaba en su país a fútbol y no quería perder la forma, por lo que se puso a entrenar con el SD Sueca. Este conjunto valenciano estaba realizando la pretemporada y le ofrecieron que se quedase en España vista su calidad. La primera temporada no pudo jugar ya que no llegó a tiempo el permiso. Cuando empezó a jugar llamó al interés de los grandes, entre ellos el Valencia. El jugador fue a hacer las pruebas con varios equipos, pero finalmente eligió al Valencia.

La primera temporada de Miku se tuvo que ir cedido al C.F. Crack'a, ya que por su condición de extranjera no podía jugar en ningún equipo de su edad. Y llegó lo inesperado para el Valencia, Miku tenía previsto hacer la temporada con el Valencia Mestalla pero el club descendió a tercera y en esa categoría no puede haber jugadores extranjeros, por lo que se tuvo que marchar cedido durante dos años. El primer año se marchó al Salamanca donde marcó 20 goles en 41 partidos disputados. El segundo año se fue al Murcia donde no marcó ningún gol. 

El descenso del Valencia Mestalla a Tercera impidió que Miku pudiera jugar en el filial valencianista

Después de dos años cedidos consiguió debutar con el Valencia Mestalla el 4 de febrero de 2007. En esa misma temporada fue convocado con el primer equipo del Valencia para disputar un partido amistoso, pero prefirió ir al encuentro de la Selección de fútbol de Venezuela. Tras ese año en el Mestalla Miku se fue dos años mas cedido. El primer año en el Gimnàstic donde solo consiguió anotar 2 goles en 30 partidos. En su otro año cedido se fue de nuevo al Salamanca donde consiguió anotar 16 goles en 39 partidos.

Foto: Rayo Vallecano
Foto: Rayo Vallecano

Tras las dos últimas cesiones Miku regresó al Valencia. Debutó en la UEFA Europa League 2009-10 con el conjunto valencianista ante el Stabæk de Noruega. Esa misma temporada el Valencia acabó vendiendo al delantero debido a la cantidad atacantes que tenía el club. Miku se fue al Getafe donde tras estar un año ahí, le cedió al Celtic FC. Luego volvió al Getafe para irse Al-Gharafa de Catar. Y finalmente terminó en el Rayo, donde sigue jugando actualmente. Miku ha sido un jugador muy valorado en el Valencia y tenían mucha fe en él, pero tuvo la 'desgracia' de coincidir con grandes delanteros, alguno de ellos se tuvo que marchar y le tocó el turno a él.