Victoria y gracias. Poco más se puede sacar de positivo de un encuentro donde el Mirandés fue el auténtico protagonista del partido, esforzándose por seguir con su papel de ‘matagigantes’ y pudo llevarse algo positivo de haber tenido la suerte de su lado. N’Zonzi, en una jugada llena de rechaces, y Vitolo, al final del choque, consiguieron los goles del partido.

Pese a la importancia del partido, Emery decidió hacer rotaciones. Quizá, la más llamativa estuvo en la portería, donde David Soria ocupaba el lugar dejado por Sergio Rico, en un claro mensaje de Unai sobre sus preferencias entre el canterano y Beto, en la rampa de salida. En la medular el vasco optó por el músculo con Iborra y N’Zonzi y un Krohn-Delhi que hacía las veces de Banega. Por su parte, Terrazas no abandonó su habitual sistema 3-4-3, aunque también con novedades en el once con respecto al que salió derrotado de Butarque por 4-0 el pasado domingo.

El Mirandés salió peleón, sin complejos. El conjunto burgalés ahogaba la salida de balón del Sevilla con una presión muy arriba. En los primeros compases del encuentro, no se notaba la diferencia de categoría, sino todo lo contrario, más bien parecía ser el Sevilla el equipo de segunda. El guardameta rojillo Raúl, el mejor del partido, solo se veía inquietado con tímidos acercamientos a balón parado.Y como no podía ser de otra manera, el primer gol del partido llegaría desde la estrategia.

Fortuna para abrir la lata

Krohn-Delhi bota una falta por raso al primer palo, Gameiro prolonga con el tacón y tras una serie de rebotes, el francés Steven N’Zonzi, en posición irregular, se encuentra el balón para rematar a placer dentro de la portería. El cuadro hispalense se encontraba con una ventaja poco merecida a tenor de lo visto sobre el césped.

La desventaja en el marcador no hizo bajar los brazos al Mirandés. Los de Terrazas continuaron con el plan establecido y estuvieron a punto de encontrar premio en una gran jugada por línea de fondo de Carnicer, que se marchó de dos defensores sevillistas y cedió el cuero a Bastidas, pero éste disparó a la madera.

A pesar del dominio visitante, el Sevilla se pudo ir con una ventaja más amplia en el marcador si Gameiro, en primera instancia, y luego Krohn-Delhi hubieran acertado a rematar una jugada al filo del descanso, que fue desbaratada nuevamente por el cancerbero castellanoleonés.

Sin premio al esfuerzo del Mirandés

El paso por los vestuarios sirvió a los sevillistas para buscar más protagonismo en el partido y volcarse sobre la portería contraria, pero el invento duró poco. El cuadro de Miranda de Ebro siguió en la misma línea, aunque esta vez sí, las ocasiones más peligrosas llegaban del lado rojiblanco. Reyes con un tiro seco estuvo a punto de anotar el segundo, pero el chut salió centrado. La grada empezó a impacientarse y comenzaron a aparecer los primeros silbidos, que más tarde se convertiría en una clara sinfonía de descontento de la afición sevillista.

Krohn-Delhi volvería a ser protagonista, esta vez negativo, en la ocasión más clara de la segunda parte con un mano a mano, pero el danés no estuvo acertado a la hora de definir. El Mirandés tuvo su ocasión para poner las tablas en el marcador pero el disparo a media distancia de Moreno salió despedido de los guantes de Soria. Solo en este momento tuvo una opción clara de perforar la portería, ya que casi siempre los ataques morían a la orilla del área sevillista.

En el descuento, la puntilla

Con el tiempo prácticamente cumplido, llegó la sentencia del choque, que no de la eliminatoria. Mariano centra al segundo palo ante la llegada de Krohn-Delhi, el danés ve a Vitolo y éste empuja el esférico dentro de las mallas en otra jugada afortunada. Con poco, los de Unai Emery se hacían con el partido.

Al final el Sevilla hizo los deberes y sacó un resultado muy bueno para la vuelta. La tragedia se mascó por momentos, el partido fue malo, las formas no gustaron, pero lo que queda es el resultado y el pase a semifinales está más cerca. El domingo, en Liga, espera el Atlético, que volverá a examinar las virtudes del Sevilla como visitante.

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