Se repite la historia. Año tras año, desde que el Granada consiguiera el ascenso a Primera, enero aparece en el calendario de la mano de varias palabras que parecen atraídas como imanes a este mes. Propósitos, fichajes y cambio de entrenador son algunas que se repiten con asiduidad en el periplo rojiblanco por la élite a estas alturas de temporada. Sin embargo, hay una que nunca falla y que empieza a estar en boca de todo el granadinismo llegados a este punto: final.
Sí, porque lo que se disputará el sábado en el Estadio Los Cármenes supondrá la primera de una incesante sucesión de finales para el conjunto nazarí en post de la salvación. Quizás sea pronto para evocarlo, pero a este término se llega debido a la mala situación que ostenta el equipo en la tabla, a los malos resultados cosechados y al calendario que viene en las próximas semanas. Con un punto sobre el descenso, la victoria ante el Getafe se antoja fundamental para despedir el primer mes del calendario fuera de la quema y luego Dios dirá.
Al coliseo del Zaidín llega un Getafe crecido, ambicioso y que respira tranquilidad tras una concatenación de victorias que ha aupado a los azulillos a mitad de la tabla. Aunque Europa asoma en el horizonte más cerca de lo que amenaza la Segunda División, los de Fran Escribá querrán tener los pies en el suelo y prolongar en tierras andaluzas su idílico inicio de año.
Redención
El Granada ha encajado 13 goles en los último cuatro partidos liguerosLa afición granadinista se convertirá el sábado en juez. La humillante derrota del lunes en Eibar ha dolido mucho en la parroquia rojiblanca, que ve como su equipo lleva un lustro sumido en esa situación de sufrimiento que te confiere, casi sin poder replicar, el hecho de ser pequeño entre los grandes. Vivir sin agonías en la cúspide del balompié español es difícil para un club modesto pero se puede conseguir y si no, que le pregunten al Getafe ahora mismo. Esa posición de comodidad es la que anhela el hincha nazarí y por la que alentará a los suyos cuando comience el duelo, al margen de juicios anteriores o posteriores.
El último partido liguero en casa, ante el Sevilla, dejó muy buen sabor de boca al Granada y esa será la senda que busquen recuperar. Solo han pasado 20 días de aquella brava faena con los hispalenses pero por medio todo han sido goleadas en contra. La encajada ante el Barcelona en el Camp Nou era previsible. Las recibidas en la eliminatoria copera ante el Valencia, inmerecidas. La sufrida en Ipurúa, sonrojante. Todas ellas han hecho que el Granada pase a ser el segundo equipo más goleado de la Liga, que su sistema defensivo esté muy entredicho y que la distancia con el descenso no haya podido aumentarse. Con Villarreal, Real Madrid, Real Sociedad y Valencia esperando pasar revista a la zaga de los de Sandoval, los tres puntos ante el Getafe son prácticamente ineludibles para alcanzar la quinta permanencia consecutiva en Primera. Y Los Cármenes rugirá por ello.
Licencia para soñar
Corren buenos tiempos por el sur de Madrid. El Getafe llega a Granada en su mejor momento de la temporada tras acumular seis partidos seguidos sin conocer la derrota y tres victorias consecutivas. 12 puntos cosechados en poco más de un mes han permitido a los azulones distanciarse a diez puntos del descenso y colocarse a siete de puestos europeos. En tierra de nadie y con los motores encendidos, la escuadra de Fran Escriba intentará continuar con su vuelo hacia los puestos altos.
Buena culpa del gran momento que atraviesa el club madrileño la tiene Pablo Sarabia. El que fuera canterano del Real Madrid suma cinco goles esta temporada, la mayoría de los cuales han llegado en esta racha positiva. El peligro arriba llega de sus botas y de las de otros como Pedro León, Víctor Rodríguez o Álvaro Vázquez. Dinamita con acento español. Mientras, en defensa, el ex granadinista Juan Cala se ha hecho con la confianza de Escriba y ya domina el eje de la zaga getafense.
El reto de suplir a Peñaranda
Por si fueran pocos los problemas que acucian a José Ramón Sandoval, esta semana se ha añadido uno extra. Adalberto Peñaranda, el delantero revelación del Granada, se lesionó en el encuentro ante el Eibar y estará ausente durante tres semanas. Un contratiempo más para la difícil situación del entrenador de Humanes. El rumor de su posible sustitución corrió como la pólvora el martes, dándose por hecho su adiós y la llegada de Francisco, ex del Almería. Finalmente, el duo Pina-Cordero decidió darle un voto de confianza al míster, probablemente el último. De no conseguir los tres puntos, el futuro de Sandoval se antoja lejos del banquillo de Los Cármenes.
El protagonismo ahora recaerá en Yousseff El Arabi. El marroquí volverá al once inicial para asumir la punta de lanza y la complicada misión de hacer goles en el Granada. Sandoval ya se ha encargado de mostrarle su apoyo previo al partido, afirmando que “ahora es su momento y tiene que reivindicarse”. Acompañándole en ataque estarán, salvo sorpresa, Isaac Success y Rubén Rochina. El valenciano vuelve tras su sanción y su equipo lo necesita más que nunca. En la mediapunta es donde ha encontrado su mejor nivel y ahora Sandoval debe decidir si mantenerlo en esa posición o desplazarlo a un costado, donde pierde protagonismo.
La principal novedad en la convocatoria es el regreso de Thievy Bifouma aunque el congoleño será duda hasta el entrenamiento matutino del sábado. Sandoval ha citado a 19 futbolistas y deberá hacer un descarte antes del encuentro. Javi Márquez y Salva Ruiz también vuelven a estar citados tras perderse el duelo en Eibar. A la baja de Peñaranda hay que sumar la de Diego Mainz por lesión y Cristiano Biraghi por acumulación de tarjetas. Babin y Doria pelearán por el puesto del madrileño, pudiendo jugar incluso los dos según el esquema por el que opte el técnico. Para suplir a Biraghi, la opción de Edgar en el costado izquierdo es la más probable.
La lista de convocados la componen: Andrés Fernández, Kelava; Lombán, Doria, Babin, Foulquier, Miguel Lopes, Salva Ruiz; Rubén Pérez, Krhin, Márquez, Fran Rico, Uche, Edgar, Rober Ibáñez; Rochina, Thievy, El Arabi y Success.
El que avisa no es traidor
Fran Escriba no se fía para nada del Granada pese al mal momento en que se encuentra. El entrenador valenciano cree que “la dificultad del partido es máxima y más cuando los equipos vienen mal”. Escriba espera un Granada “herido” y afirmó que han trabajado para “potenciar las virtudes propias” como manera de encarar el encuentro.
Escribá: "la dificultad del partido es máxima"En el capítulo bajas, Roberto Lago sigue sin estar disponible en el equipo azulón. De esta forma, la duda se encuentra en el lateral izquierdo, donde Yoda actuó de parche la semana pasada y podría repetir en esta. Además, Álvaro Medrán ultima su recuperación aunque no ha llegado a tiempo. Con los que ya no podrá contar más Escriba es con Alexis Ruano y Ángel Lafita. El primero hace las maletas para jugar en el Besiktas turco y el segundo ya es jugador del Al Jazira, de los Emiratos Árabes Unidos.
La convocatoria getafense la componen: Guaita, Megyeri; Velázquez, Vergini, Cala, Vigaray, Damián; Lacen, Sarabia, Yoda, Pedro León, Bernard, Víctor Rodríguez, Moi Gómez, Juan Rodríguez, Wanderson; Álvaro Vázquez, Scepovic.
Arrimando el hombro
La Asociación de Peñas G19 se ha erigido en voz de la afición para la batalla que se librará en Los Cármenes. Conscientes del mal momento de los rojiblancos y de la necesidad de darles todo el aliento posible, el colectivo de peñas ha lanzado varias iniciativas para que la masa social granadinista apoye a su club.
A las 19:00 horas, el G19 anima a todos los aficionados nazaríes para que se personen en el recibimiento al autobús del equipo, en la calle Pintor Maldonado. Posteriormente, en el minuto 12 de partido, proponen llevar a cabo un gran aplauso conjunto para mostrar a los jugadores que la hinchada está ellos, en lo que han denominado “el minuto de la afición”. Además, han creado el hastag #SomosEl12 para recabar los mensajes de apoyo que lleguen a través de las redes sociales.
Posibles onces iniciales
