Nunca es bueno hacer grandes pronósticos sobre jugadores, porque es muy fácil equivocarse. Y si los pronósticos no son buenos, las comparaciones aún lo son menos. Pero en ocasiones son inevitables. E inevitablemente si vemos la pareja Aleñá- Lee, se viene a la mente otra pareja Iniesta-Messi.

Pero quienes son estos dos jugadores:

Carles Aleñá

Aterrizó en los benjamines del Barça cuando tenía ocho añitos. Se le conoce como “el Maradona de la cantera”, primero por su pelo rizado y después por su talentosa pierna izquierda.

Aleñá destaca por su calidad sobre el terreno de juego. Empezó de extremo zurdo, pero con el tiempo retrasó su posición, y acabó jugando de interior.

En esta demarcación es donde explota sus virtudes, visión de juego, llegada, buen disparo y una capacidad física, normalmente ausente en los jugadores de la cantera azulgrana.

En definitiva todas las virtudes de los “bajitos”, que además posee potencia en el juego aéreo, lo que hacen de él un diamante en bruto.

Fuera del terreno de juego se muestra como un chico maduro. Extrovertido, abierto e integrador con los foráneos, razón que le ha servido para ser siempre uno de los capitanes del equipo. Esta razón, también le ha servido para convertirse en uña y carne del otro protagonista del artículo, Lee.

Seung Woo Lee

La otra parte del dúo, Seung Woo Lee. De este chico se han conocido muchas cosas desde que está en el Barça. Llegó, vio y triunfó. Enamoró a todos y cada uno de los conocedores del fútbol base azulgrana, por sus goles y por su desparpajo. También hay que reconocer que dio más de un dolor de cabeza a los responsables del fútbol base por su indisciplina. Todo se torció en 2013. La FIFA castigaba al Barça, y le condenaba al ostracismo hasta que cumpliese 18 años.  Casi tres años se ha pasado sin poder jugar con el Barça, jugando solo con la selección de Corea, y demostrando que sabe brillar de manera especial.

Es un jugador diferente, que puede convertirse en una estrella. Por ello el Barça, ha tenido un trato especial con él. Hablaron con su padre, y tras conocer la firme voluntad de Lee de no moverse de aquí, pactaron con él, un contrato diferente al habitual de un jugador del fútbol base. Los detalles de este contrato nunca han transcendido.

Y así hasta hoy. Lee volvió a jugar con el Barça. Es feliz, y aunque ya no vive en La Masía. Está encantado porque vuelve a disfrutar jugando al fútbol.

Aleñá y Lee sonrientes y siempre juntos. /Foto: Noelia Déniz (Vavel.com)/

Pareja de moda

Ambos se han convertido en la pareja de moda del Juvenil A, que entrena Gabri. Se entienden tanto dentro como fuera del terreno de juego, y pese a que hay que tener paciencia, muchos empiezan a soñar que: “La pareja Aleñá-Lee promete grandes tardes de fútbol en el Camp Nou”.