El fondo de inversión Doyen Group realizó un préstamo con el Real Sporting de Gijón mediante el cual le dio dos millones de euros para acabar recibiendo, a largo plazo, diez millones por la venta de algunos jugadores, según ha desvelado este martes “Football Leaks”. Esta famosa web ha publicado todos los documentos del acuerdo alcanzado por el fondo y la entidad gijonesa en el mes de septiembre de 2011, en el cual estipula que el club estará obligado a devolver cinco veces más del dinero prestado.

En dicho acuerdo se afirma que el Real Sporting es totalmente consciente de las condiciones económicas bajo las que se está trabajando. “El club manifiesta ser consciente de las condiciones económicas en las que recibe el dinero del inversor y de la rotundidad de las obligaciones que asume, y aún así, insiste en su otorgamiento por entender que este contrato responde a sus necesidades e intereses y no menoscaba su situación financiera ni patrimonial”, dice claramente. Doyen se garantizaba recibir siete millones por la venta de algunos futbolistas, entre los que cabe destacar a jugadores que actualmente militan en el conjunto rojiblanco como son Canella y Sergio Álvarez.

Una vez abonados los siete millones iniciales, los tres que quedarían se darían a través del 20 % de los derechos económicos de los demás jugadores de la plantilla. “El presente contrato mantendrá su vigencia entre las partes hasta la fecha en la que el club haya remunerado al inversor con diez millones de euros”, se precisa en el documento. En el texto se encuentra una cláusula que redacta que si no hubiera ingresado los siete millones de euros antes del 31 de enero de 2015, Doyen Group tendría derecho a recibir el 50 % de las transferencias de todos los jugadores del club asturiano hasta que se llegara a la cifra acordada.

Además el fondo de inversión también conseguía algunas ventajas como “la representación del club como agente futbolístico en exclusiva, de forma que todas las operaciones de compra, venta y préstamos serán realizados a través de su intermediación”.

A pesar de todo esto, el Sporting argumentó en su día que el acuerdo se debía de llevar a cabo debido a las “urgentes e importantes necesidades de tesorería ya que existen grandes dificultades para acceder a financiación bancaria por la crisis”.