Podría haber sido un partido decisivo por el título de Liga pero tanto Real como Atlético de Madrid llegan al choque de hoy después de cosechar sendos empates que les han separado en exceso del líder de la clasificación, el Barcelona. Ninguno de los dos equipos de la capital de España llegan al duelo con buenas sensaciones de juego ni se sienten cómodos en el rol que les ha tocado vivir en la Liga por ser tan irregulares pero saben que el partido de hoy es importantísimo para ellos.

Un derbi no es un partido cualquiera y más el derbi madrileño, uno de los más importantes y con más rivalidad de Europa. Ambos equipos son conscientes de que sus aficiones van a mirar con lupa cada detalle del partido y cada uno de los 22 jugadores que saltan al campo lo hacen sabiendo que una buena actuación les hará estar muy bien mirados por su parroquia durante un largo periodo de tiempo.

Tremenda racha blanca

Durante muchos años el Real Madrid sometió a su vecino capitalino a caer una y otra vez cuando se veían las caras, hasta 25 derbis estuvieron sin perder los blancos con un balance total de 19 victorias y 6 empates. Una racha totalmente impresionante que parecía no tener fin. Unas veces eran muy superiores, otras ganaban con polémica arbitral y otras simplemente eran más efectivos, pero el caso es que los partidos se inclinaban siempre del mismo lado.

El jugador del Madrid más temido por los rojiblancos sin duda era Ronaldo Nazario, el brasileño siempre era un martillo pilón en los derbis que disputó y su eficacia y sangre fría de cara a gol destruían siempre las esperanzas de su rival. Otro de los peores enemigos que tenían los vecinos de la ribera del Manzanares era simplemente ver la camiseta blanca y es que antes de los primeros cinco minutos ya habían encajado algún gol en muchos de los partidos de su terrorífica racha de partidos sin ganar.

Simeone, el genio colchonero

Pero como todo en la vida, tiene su final y aunque llegó muy tarde finalmente llegó y se logró revertir la situación. No había mejor manera de romper el maleficio que en un escenario maravilloso, final de la Copa del Rey frente a tu eterno rival y en su estadio, el Santiago Bernabéu. Además, no había mejor forma de ganar que siendo inferior durante gran parte del partido, ver cómo la suerte te acomapaña en forma de tres palos del rival y ganarle en la prórroga en una jugada marca de tu estilo, el balón parado.

Aquel cabezazo de Miranda el 17 de mayo de 2013 cambió la tendencia de los derbis y ahora es el Real Madrid el que sufre en todos y cada uno de los duelos. Desde entonces han sido 14 las veces que se han visto las caras con un balance de 5 victorias colchoneras, 6 empates y 3 triunfos merengues. Este cambio ha sido en gran, o total, medida gracias a Diego Pablo Simeone y el gen competitivo que ha impuesto en el equipo. En todos los partidos desde la llegada del técnico argentino se ha visto a un Atleti muy fuerte y compacto que o ha ganado o a puesto contra las cuerdas a su rival.

"Se busca rival digno para derbi decente"

Atendiendo a lo que es en sí la rivalidad de un derbi, este último cambio de tendencia ha venido bien a todos y más en especial a los madrileños para volver a revivir la pasión de estos partidos. Nunca se perdió la pasión pero la monotonía de saber cuál iba a ser el desenlace de la mayoría de los duelos con los blancos felices burlándose de los cabizbajos hinchas colchoneros se hacía ya muy aburrida.

En estos últimos tres años se han disputado directamente un título de Liga, una final de Copa del Rey y una final de la Champions League, además de encontrarse un par de veces en eliminatorias tanto en España como en Europa. El balance ha sido bastante equitativo entre ambos y la rivalidad ya se vuelve a sentir en las calles, los del Atleti ya no tienen motivos para agachar la cabeza los lunes en el trabajo, ahora van la cabeza muy alta y muchas veces incluso con una sonrisa burlona.

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