Ni el Camp Nou, ni el Bernabéu, ni el Calderón, ni el Emirates, ni el Etihad, ni el Allianz, ni el Signal Iduna Park, ni San Siro, ni Il Nuovo Della Juventus, ni el Parc Des Princes. El campo más complicado del continente está en Sevilla y se llama Ramón Sánchez – Pizjuán. Tras la victoria por 1-0 ante el Eibar, el cuadro hispalense acumula una racha de 12 partidos seguidos ganando en Nervión. El Bayern, única competencia hasta el momento del Sevilla en ese aspecto, pinchó por 1-2 ante el Mainz, con gol incluido de Jairo, ex - jugador del club andaluz. Así pues, es el Sevilla el que atesora el récord y quien tiene la posibilidad de seguir aumentándolo. No sería una locura pensar que esta racha se podría alargar hasta el final de la presente campaña, ya que los equipos que faltan por visitarla son asequibles, excepto el Villarreal. Pero será contra el equipo groguet el partido más vital para los sevillistas, ya que es la última bala para alcanzar puestos de Champions.

12 victorias muy trabajadas

Emery ha construido una fortaleza en casa, para hacer sentir a los jugadores el calor de la afición en su "hogar, dulce hogar". Sus fundamentos son Sergio Rico y una férrea defensa, escoltados por un sólido centro del campo y cimentado con los goles de los atacantes, donde Kevin Gameiro se convierte en un escultor de lujo, ya que 12 de sus 13 dianas ligueras las ha anotado en casa. 28 goles a favor y 7 son los impresionantes números que permiten el gran estado de forma del conjunto blanquirrojo en casa.

Los grandes equipos de España han hincado la rodilla en el Sánchez – Pizjuán; ni el todopoderoso FC Barcelona, ni el millonario Real Madrid, ni históricos como el Athletic, el Valencia o el Málaga han conseguido rascar algún punto en el estadio de la capital andaluza.

La bipolaridad sevillista

El objetivo del Sevilla es, sin duda, ganar fuera de casa, pero no conviene olvidar que si son quintos es gracias a los magníficos resultados cosechados en casa, por lo que deben centrarse en vencer a domicilio y mantener la actual racha.