La llegada de Cani al Atlético de Madrid fue uno de los movimientos más extraños de la pasada temporada. El futbolista aragonés llegó en el mercado invernal escondido tras el mediático fichaje de Fernando Torres. Un hecho que podría justificar el poco revuelo que provocó su incorporación, pero que nada tiene que ver con lo discreto de su estancia en el club del Manzanares. No era un mal refuerzo para el equipo, pues venía de realizar muy buenas campañas en el Villarreal, pero sí fue una llegada inesperada. El centrocampista no atravesaba su mejor momento en el conjunto amarillo, había perdido peso en el equipo y sus encontronazos con Marcelino dificultaban su continuidad en la entidad castellonense. Necesitaba una salida y el Atlético le abrió la puerta. Sin embargo, el paso de Cani por el Manzanares no fue de los que dejan huella.   

Cani estuvo apenas seis meses en el Atlético, donde disputó un total de seis encuentros

El centrocampista estuvo casi seis meses a las órdenes de Simeone en calidad de cedido y apenas contó con oportunidades. No se esperaba que se hiciera con la titularidad teniendo por delante a jugadores como Arda, Koke o Raúl García, pero sí se veía a Cani como un suplente de lujo, con experiencia y visión de juego. Pero ni una cosa ni otra. Aún se desconoce si esa falta de confianza por parte del técnico argentino se debe a la ausencia de compromiso por parte del jugador, al bajo rendimiento ofrecido en los entrenamientos o si simplemente el Cholo prefería dar minutos a otros futbolistas. Lo que sí que estaba claro es que el centrocampista se marcharía como llegó, sin hacer ruido.

Una noche de Champions en la memoria

Entre suplencias y ausencias en convocatorias, Cani apenas participó en seis encuentros con el Atlético de Madrid. Cuatro de Liga BBVA, uno de Copa del Rey y uno de Champions League. Partidos en los que apenas tuvo incidencia en el juego rojiblanco, ofreciendo actuaciones bastante discretas sobre el césped.  Sin embargo, hay un choque que seguro que Cani no olvidará de su paso por el Manzanares.

Cani fue titular en Champions League ante el Bayer Leverkusen / Jaime del Campo - VAVEL

Se trata del duelo que enfrentaba al Atlético de Madrid y al Bayer Leverkusen en octavos de final de la Champions League. Los rojiblancos debían remontar el 1-0 de la ida y Simeone sorprendió colocando a centrocampista aragonés en el once por primera vez desde su llegada. Cani ya sabía lo que era jugar en la máxima competición continental, lo hizo en varias ocasiones con el Villarreal, pero su presencia de inicio podría resultar arriesgada por la falta de compenetración que aún podía tener con sus compañeros. Sea como fuere, el Cholo apostó por él y acertó: sin destacar demasiado, Cani fue el asistente en el gol de Mario Suárez para igualar la eliminatoria. Finalmente, y con tanda de penaltis de por medio, el Atlético de Madrid pasaría a cuartos gracias en parte a la aportación del ex del Villarreal.

Buscando su sitio en La Coruña   

Una vez concluida su vinculación al club rojiblanco a final de curso, Cani hizo las maletas y se marchó a La Coruña. Fichó por el Deportivo con el objetivo de recuperar el nivel ofrecido en el Villarreal tras el intento fallido a orillas del Manzanares. Y de momento sigue en proceso de adaptación.

Después de un inicio de temporada titubeante, donde las lesiones y las ausencias por decisión técnica de las convocatorias le impidieron jugar con regularidad, parecía que el aragonés se había ganado la confianza de Víctor Sánchez del Amo. Y es que Cani se había hecho con la titularidad en esta segunda vuelta liguera, pero una lesión en la vigesimocuarta jornada frenó su progresión.Unas molestias de las que a día de hoy ya está recuperado y por tanto podrá jugar ante el Atlético este sábado. Un duelo importante, para seguir con su objetivo del volver a ser ese gran centrocampista que fue en Villarreal, y nostálgico, por reencontrarse con un club con el que podría haber logrado grandes cosas.