Semana tras semana se acerca lo inevitable. Lo que nadie quiere en Tafalla, pero que parece próximo de llegar. A doce puntos de la salvación, la Peña Sport será, con el permiso del retirado Huracán Valencia, uno de los primeros equipos en sellar su descenso a Tercera División. Justo un año después de proclamarse campeón en el Grupo XV de la cuarta categoría del fútbol nacional y obtener el ansiado retorno a Segunda División B el sueño se desvanece por completo.

Y es que ni la Semana Santa obró el milagro esperado por todos en Tafalla. La Peña Sport no fue capaz de puntuar en Pasarón a pesar de que estuvo muy cerca de hacerlo. Un penalti cometido por Beñat Alemán sobre Borjas Martín en el minuto 84 lo evitó. El delantero canario del cuadro gallego no falló y echó por tierra todo el esfuerzo realizado por el cuadro navarro. Los resultados fueron benévolos y mantuvieron la distancia de doce puntos con la salvación, aunque las sensaciones no pueden ser peores.

Con 21 puntos en juego, la Peña Sport debería sumar, al menos seis victorias de los siete encuentros que deberán disputarse. Cifra muy complicada de conseguir si se tiene en cuenta que en los 31 choques anteriores sólo ha sumado seis triunfos. Por ello, la idea de permanencia se complica. Más si se tiene en cuenta que el conjunto de Tafalla sólo tendrá que medirse a dos rivales directos como son el Real Valladolid Promesas y el CP Cacereño y en ambas ocasiones a domicilio.

Para colmo de males, el golaveraje con los otros conjuntos inmersos en la lucha por eludir el descenso no abren demasiadas esperanzas para los pupilos de David Ruíz. Los filiales del Celta de Vigo y del Sporting de Gijón, además del Atlético Astorga le tienen ganados los enfrentamientos particulares, por lo que la distancia deberá crecer de hecho un punto. Con la SD Compostela está en empate, aunque la diferencia general favorece sin paliativos al cuadro gallego. Con estas circunstancias la supervivencia de la Peña Sport en Segunda División B pende de un hilo.