Mikel Méndez, central del Amorebieta, está viviendo su primera temporada como azul, donde declara estar “contento” por la confianza depositada en él desde el inicio tanto por el entrenador como por la directiva. El jugador vizcaíno nos atiende después de que su equipo consiguiera la victoria ante el Toledo, tres puntos que le han permitido reengancharse a la lucha por el cuarto puesto.

El central vasco comenzaba declarando que después de una “dura” segunda vuelta, donde los de Carlos Docando han atravesado un pequeño bache de seis jornadas sin conocer la victoria, el  partido ante el Toledo lo afrontaban sabiendo que si “ganaban”, tendrían opciones de “pelear” por el cuarto puesto. Méndez reconocía que la victoria les sirvió de “bálsamo”, ya que con los tres puntos conseguidos en el Salto del Caballo se colocaron a tan solo seis puntos del conjunto de Onésimo, que se coloca en el cuarto puesto.

"La victoria ante el Toledo nos sirvió de bálsamo"

Por si fuera poco, el jugador del Amorebieta recordaba que esta misma jornada se iba a disputar uno de los duelos de la jornada, ya que Sestao River, quinto clasificado, y Toledo, cuarto clasificado, se iban a ver las caras en Las Llanas. Ante este partido, Mikel Méndez reconocía que el partido ante el Socuéllamos cobraba más “importancia”, ya que en caso de conseguir un resultado favorable, darían “un paso de gigante”.

El barakaldés destacaba del Socuéllamos que habían realizado un mes de marzo “espectacular”, donde habían ganado todos sus partidos, además de destacar la gran calidad “de sus jugadores”. Al ser preguntado por las claves del partido, el jugador del Amorebieta declaraba que las claves del partido estarían en la “intensidad”, el “orden en defensa” y mantener la portería “imbatida”.

"Si ganamos al Socuéllamos daremos un paso de gigante"

A los vizcaínos el calendario les ha deparado un tramo final diferente al de sus rivales, ya que a diferencia de equipos como el Toledo o el Arenas, entre otros, los azules se enfrentarán, mayormente, a equipos que luchan por no descender a Tercera División o que, incluso, podrían no jugarse nada. El central del Amorebieta manifestaba que afrontaban estos últimos siete partidos con “ilusión”, ya que después de conseguir el objetivo de mantenerse un año más en Segunda División B, pueden seguir optando a cotas más altas. Pero a pesar de tener un calendario diferente al de sus rivales, Méndez recordaba que el bache de la segunda vuelta llegó ante equipos que estaban peor clasificados en la tabla, por lo que el central comentaba que tenían que "respetar" a “todos” los equipos, ya que según Méndez, en Segunda División B "cualquier equipo puede ganar a cualquiera".