El Estadio de Vallecas acogía el primer partido de la 31ª jornada de la Liga BBVA, que volvía tras el parón de selecciones. Getafe y Rayo Vallecano llegaban al encuentro con los mismos puntos, aunque con dos puestos de diferencia. Los de Fran Escribá necesitaban sacar un resultado positivo para poder salir del descenso, lo mismo que los franjirrojos, que no querían volver al infierno.
Fran Escribá sacaba su once de gala para intentar hacer un buen papel en el feudo vallecano con Álvaro Vázquez en punta y Sarabia y Medrán en la sala de máquinas. Por su parte, Paco Jémez alteraba su esquema habitual por la lesión de Jozabed, que no volverá a jugar más esta temporada por una artritis traumática en el tobillo izquierdo. El entrenador canario salía en ataque con Miku y, sorprendentemente, Javi Guerra en el once titular y dejaba en el banquillo a Manucho por decisión técnica.
Polémica y despertar del Rayo Vallecano
El partido comenzaba de manera fulgurante entre el Rayo Vallecano y el Getafe. Los azulones salieron mejor al terreno de juego en los primeros minutos y la primera ocasión con peligro llevaría su firma. Sarabia obligaba a Juan Carlos a estirarse y evitar el 0-1 con tan solo siete minutos de partido disputados.
La polémica no tardaría en llegar. Javi Guerra metía gol después de hacerse con un rebote en el área y el árbitro lo daba por válido ante las protestas de los jugadores del Getafe. Sin embargo, a última instancia el juez de línea hablaba con el colegiado y le transmitía que el tanto no era válido. Tres minutos después el Rayo Vallecano se "vengaba" y conseguía meter el 1-0. Guaita despejaba un cabezazo de Baena en un saque de esquina botado por Trashorras y el balón le caía a Miku, que después de un rebote pasaba a Javi Guerra para que este anotase el primer tanto en boca de gol.
El Getafe no reacciona
La mala noticia del gol del malagueño era la expulsión de Yoel, que se encontraba en el banquillo, por protestar. El tanto de los de Paco Jémez pareció conectar al Rayo Vallecano, que a partir de ese momento se hizo dueño y señor del partido. El Getafe no empeoró su imagen en la primera mitad, pero no fue capaz de crear más peligro a Juan Carlos.
El primer tiempo llegó a su fin con la momentánea victoria del Rayo Vallecano gracias al salvador tanto de Javi Guerra, que no marcaba con los franjirrojos desde el pasado trece de diciembre. Además, el malacitano se volvía a quedar solo como máximo goleador del cuadro vallecano con diez goles, uno más que Jozabed.
La reanudación solamente sirvió para confirmar el resultado con el que se llegó al descanso. A pesar de que los franjirrojos acabarían imponiendo su juego, los azulones volvieron a empezar con fuerza. Medrán pudo empatar a la salida de un córner, pero finalmente su cabezazo se marchaba desviado.
Los de Paco Jémez se hacen con el control del partido
Después de la oportunidad del canterano madridista, todo volvió a su cauce. Los de Paco Jémez se hicieron rápidamente con el control del balón y no permitieron que el Getafe se consiguiese meter en el encuentro. Así pues, Fran Escribá hizo debutar con los azulones a Henok Goitom en detrimento de Lacen y decidió jugar con dos delanteros en ataque. Los azulones comenzaron a dejar demasiados espacios en defensa y el Rayo no se lo pensó dos veces y empezó a crear bastante peligro por el área defendida por Guaita.
Pablo Hernández tuvo en sus botas el 2-0, pero su disparo desde fuera del área se iba rozando el poste. Escribá volvía a mover el banquillo con la entrada de Wanderson y el entrenador rayista también realizaba una sustitución. Prácticamente después de la entrada de Manucho al campo, llegaba el segundo tanto de los rayistas.
Miku sentencia el encuentro
Después de que Quini desaprovechase una clara ocasión ante Guaita, el Rayo recuperaba rápidamente la pelota. Pablo Hernández se hacía con el balón y centraba desde la banda derecha para que Miku se adelantase en el marcador y enviase el balón al fondo de las mallas. El gol del venezolano hizo claudicar al Getafe, que minutos más tarde tuvo una buena oportunidad para recortar distancias. Medrán recogía el balón en la frontal del área y sacaba un buen disparo, pero el balón rozaba el travesaño y se marchaba fuera.
Los últimos minutos del encuentro solo sirvieron para que el Rayo Vallecano se dedicase a no perder la posesión y evitar que el Getafe pudiese marcar siquiera un solo tanto. Con esta derrota el Getafe se hunde un poco más y suma ya once jornadas consecutivas sin conocer la victoria.