Este sábado se cumplirá una vuelta del choque que consagró a Rafa de Vicente como gran cerebro de la medular grana. En el derbi en Nueva Condomina, ante un Cartagena lleno de moral tras tres triunfos consecutivos, su titularidad fue la gran sorpresa de José Manuel Aira. Una sorpresa que pasados los 90 minutos daría la razón al de Ponferrada, a la vez que iniciaría una fase de campaña triunfal para los granas, con Rafa como pieza básica dentro del buen funcionamiento colectivo.

La medular anduvo desnortada, fuera de sí, incapaz de darle sentido al juegoCuatro meses después de aquel momento, la situación del mediocentro ha dado un vuelco. Su bajón las últimas semanas le ha sacado del once, llevándolo incluso a la grada, como así ocurrió en el último envite ante el Recre. Precisamente en ese último duelo, el mediocampo grana cuajó uno de los peores encuentros hasta la fecha. Con todo un mundo para remontar, la pareja Armando – Chavero anduvo desnortada, fuera de sí, incapaz de darle sentido al juego. Tal fue el apagón que Aira se vio obligado a dar todo el peso creativo a Arturo, que acabaría siendo una de las pocas noticias positivas de la tarde.

Descensos paralelos

No fue de extrañar por tanto que mucho se hicieran la misma pregunta tras aquel encuentro: ¿y Rafa? Pregunta que tiene respuesta en el mal momento atravesado por el malagueño, el cual está coincidiendo de pleno con el de su equipo. El bajonazo de Rafa de Vicente ha empobrecido el juego y rendimiento de un Murcia que mantiene su vértigo e incisión arriba, pero que ha perdido ese poso, ese madurar a fuego lento los partidos.

Se ha difuminado la capacidad grana para manejar el timing de cada choque

El Murcia sin Rafa es menos rico y más previsible. Su juego asociativo pierde enteros en favor del fútbol más directo. Todo ello ha repercutido negativamente en la seña de identidad que ha venido caracterizando al Real Murcia esta temporada: su capacidad para entender, manejar y controlar el timing todo cuanto sucede sobre el verde.

Imagen: Guillermo Carrión (AGM)
Imagen: Guillermo Carrión (AGM)

Ante el Cartagena y en un ambiente hostil, el Real Murcia volverá a poner a prueba su capacidad para dominar partidos. Un hecho que ha demostrado saber hacer como nadie y al que seguro ayudaría la vuelta de un Rafa de Vicente que está ante su gran oportunidad de volver a brillar con luz propia, como ya hiciera en la ida. Pues él, y solo él, sabe cómo hacer carburar la sala de máquinas grana, cuyo renacer supondría un gran primer paso hacia la recuperación del cuadro pimentonero.