Dolorosa derrota la cosechada por el Castilla ante el Lleida que elimina definitivamente de la carrera por el ascenso al conjunto filial del Real Madrid. El sueño de volver a jugar a Segunda se disipó en el tramo inicial del choque, cuando en el minuto 30 un más que dudoso penalti de Abad, que además le costó una tarjeta roja, puso por delante a los catalanes, e inclinó definitivamente la balanza en su favor.

Tras el partido, el técnico madridista, Luis Miguel Ramis, habló tras el encuentro, y en primer lugar fijó su mirada en arengar a los suyos: "Agradezco a los jugadores el esfuerzo que han hecho. Han tenido un comportamiento acorde con el club por el que juegan. Estoy muy satisfecho porque nunca han perdido la cara a ningún partido a pesar de las dificultades que hemos tenido. Ante eso uno puede dormir tranquilo. Son mejores jugadores que a principio de temporada y eso es muy importante en el Real Madrid", aseguró, en palabras que recoge la página web del club.

Ramis: "Somos de carne y hueso, hemos visto cómo sin dar una patada hemos acabado tres partidos con diez jugadores"

Fue crítico aunque comedido el técnico catalán con un nuevo arbitraje que condicionó al Castilla: "Los chicos son de carne y hueso y han visto que de cuatro partidos de playoff sin dar una patada hemos acabado tres con diez jugadores. Es terriblemente injusto y ellos también lo sienten. Sirve para aprender pero me he encontrado con mucha gente que me ha dicho que no entiende que no se haya penalizado la extrema dureza que hemos sufrido".

El entrenador castillista quiere ya mirar al futuro: "Hay que callar, trabajar y generar ilusión, que es lo que hemos hecho y lo que han conseguido estos jugadores. Han llegado muy lejos esta temporada, han ganado una Liga muy complicada y me quedo con eso. Y que todas estas experiencias que van viviendo les sirvan para seguir creciendo", finalizó.