Hace algo más de un año la llegada de un nuevo alcalde en Oviedo, Wenceslao López -de signo político distinto al anterior- lo que generó ciertas dudas en el seno del oviedismo sobre como tratarían el nuevo regidor y los concejales del equipo de gobiernoal Real Oviedo en su mandato.

Hubo una primera reunión a los pocos días de la elección de nuevo alcalde entre Wenceslao López, por parte del Ayuntamiento, y Jorge Menéndez Vallina y Joaquín del Olmo por parte del Real Oviedo, si bien fue un encuentro más protocolario, de presentación mutua.

Joaquón del Olmo, Wenceslao López y Jorge M. Vallina |Foto: Real Oviedo
Joaquín del Olmo, Wenceslao López y Jorge M. Vallina |Foto: Real Oviedo

A partir de ese encuentro y pese algunas desavenencias se estableció una comisión entre ámbas partes que trabaja desde emtonces en la sombra, poco ha trascendido de la misma más allá de la representación del Ayuntamiento por parte de uno de sus concejales, Roberto Sánchez Ramos.

La primera medida consensuada ha sido la renovación del césped y las capas de arena y grava que lo sustentan, medida que se llevará a cabo en las próximas semanas. Esta renovación obedece especialmente al mal estado del terreno de juego a lo largo de estos años -excepto la pasada campaña- y a la antigüedad de la hierba del Carlos Tartiere ya que salvo en algunas zonas no fue renovada desde su construcción allá por el año 2000.

También se espera acometer algunas mejoras en el Estadio pero que quedarán pendientes ante un reajuste presupuestario que ha tenido que hacer el Ayuntamiento de Oviedo tras varias sentencias en su contra por deudas derivadas de anteriores mandatos.

Una nueva Ciudad Deportiva en "El Asturcón"

Uno de los retos del Grupo Carso desde su llegada al Real Oviedo es el impulso a la cantera y dotar al club de las infraestructuras necesarias para el desarrollo y formación de los futbolistas.

Vista aérea del Centro Ecuestre El Asturcón | Foto: Contratas Iglesias
Vista aérea del Centro Ecuestre El Asturcón | Foto: Contratas Iglesias

Actualmente el Real Oviedo cuenta con una Ciudad Deportiva, El Requexón, que cuenta con 3 campos de hierba natural donde entrenan el primer equipo y el filial, en ocasiones el juvenil también. Los fines de semana disputan sus partidos allí el filial -Tercera División- y el equipo juvenil de División de Honor. El resto de equipos utilizan las Instalaciones Deportivas Tensi que son propiedad del Ayuntamiento y todos los campos son de hierba artificial.

La principal opción que manejan Ayuntamiento y Real Oviedo es el uso y remodelación de las Instalaciones Ecuestres de El Asturcón recientemente cerradas por el elevado coste de su mantenimiento. Se trata de unos terrenos mucho mejor comunicados que los de El Requexón y con una extensión ya utilizada de 30 hectáreas que podrían ampliarse hasta las 40, todas ellas declaradas de uso deportivo.

El concejal de Deportes, Fernando Villacampa, declaró recientemente que se esta estudiando como dar viabilidad al traslado de la ciudad deportiva del Real Oviedo a El Asturcón y sobre todo de que manera remodelar las actuales instalaciones para su uso futbolístico.

Una de las premisas que incluiría esta opción es, en principio, mantener la actividad ecuestre para personas con discapacidad, algo que en su momento fue pionero en nuestro país y que el Real Oviedo se compromete a apoyar y mantener en las instalaciones.

Usos comerciales en el Carlos Tartiere

Desde la construcción del Carlos Tartiere siempre se ha comentado la cantidad de espacios vacios que carecen de uso y que le darían vida a la instalación más allá de los días de partido. Atrás quedó el proyecto Corner impulsado por Alberto González y Ángel Martin Vaca que no se llevó a cabo por la insolvencia de los exmandatarios oviedistas en su momento.

Fachada exterior del Estadio Carlos Tartiere | Foto: Real Oviedo
Fachada exterior del Estadio Carlos Tartiere | Foto: Real Oviedo

En la actualidad y en el marco de las relaciones entre el Ayuntamiento y el Real Oviedo se vienen valorando mejoras en el Carlos Tartiere, unas obras que sean algo más que un lavado de cara y que permitan mejorar y potenciar el Estadio tanto en su parte exterior como en una mejor sectorización de gradas y espacios interiores.

Estas actuaciones, quizas algo menos avanzadas que las de la Ciudad Deportiva, requieren una modificación parcial del uso del Tartiere para permitir que los bajos puedan ser explotados comercialmente y así dar via libre a la reforma del Estadio carbayón.