Muchas gracias y hasta siempre. Es lo único que se les puede decir. Muchas gracias por haber estado ahí, representando los colores de un pueblo volcado. Por haber sumado una etapa más a la historia ya centenaria de este club. Muchas gracias por haber dado todo sobre el terreno de juego. Por haber sonreído en la derrota y por haber calmado los ánimos tras las victorias, que no han sido pocas. Muchas gracias, también, por haber confiado. Porque si hay algo que sobra en esta institución es eso, confianza. Confianza en unos valores que, aunque se empeñen en cambiarlos desde fuera, se mantendrán arraigados por los de dentro. Muchas gracias por esas tardes. Suerte y hasta siempre.
Hay que entender que la vida ofrece opciones, caminos que siempre son distintos y no por ello deben ser peores o mejores. Simplemente son diferentes. Son salidas que pueden llevar a un regreso mejorado. Son salidas que provocan otro punto de vista. La finalización de un contrato es un momento único. Un punto en el que hay que pensar siempre. Por muy a gusto que se esté, hay que pensar en valorar otras opciones que pueden aportar, y mucho, en un futuro. Es esa la vía que han elegido hasta siete jugadores. Siete futbolistas que siempre podrán estar orgullosos del lugar del que vienen y que siempre podrán aportar aquello que llevan integrado desde las categorías inferiores.
Jonas Ramalho fue el primer jugador mulato en debutar con el Athletic
Muchas gracias y hasta siempre, Jonas Ramalho. Gracias por romper con tantos y tantos prejuicios llegados desde el exterior. Gracias por ser el primer mulato en debutar con el Athletic Club en Primera División. Vaya día aquel 20 de noviembre de 2011, cuando en el Ramón Sánchez Pizjuán Marcelo Bielsa cambiaba el rumbo de una historia que algunos aún no quieren contemplar. Además, el Athletic se imponía 1-2 y la tarde era redonda. Gracias también por los trece encuentros más con el primer equipo y por haber salido cedido al Girona con el objetivo de seguir creciendo. Al final, 65 encuentros más que crearon un líder que marcaba el camino para el Bilbao Athletic en Segunda División.
Muchas gracias y hasta siempre, Ruíz de Galarreta. Gracias por ese no dejar de intentarlo. Por esa forma de levantarse ante las adversidades, que no han sido pocas. Y gracias, especialmente, por hacer soñar a una afición vestida de rojo y blanco. Para siempre quedará el debut ante el Paris Saint Germain, nada más y nada menos, en la UEFA Europa League. Aunque hace tiempo que la camiseta zurigorri ha dejado de ser la principal, el deseo de retornar al lugar de formación siempre ha estado ahí.
Muchas gracias y hasta siempre, Egoitz Magdaleno. Aunque el paso por el filial ha estado interrumpido por alguna que otra salida a otro equipo, las puertas siempre estuvieron abiertas. Y la intención de volver siempre estuvo ahí. Ahora se sabe que la decisión no fue errónea, pues 63 encuentros oficiales no son conseguidos por cualquier jugador en el Athletic. Gracias por ser una pieza clave en el ascenso a la División de Plata y, aunque la trascendencia no ha sido la misma, gracias por tu apoyo al resto de compañeros.
Muchas gracias, Guarrotxena. Ah, y hasta siempre. Hasta siempre porque la afición rojiblanca seguirá el progreso del que ha podido ser uno de los jugadores más importantes en el paso por Segunda División del filial rojiblanco. Hasta siempre se recordarán los cuatro tantos en la Liga Adelante durante la temporada 2015/2016, los once de la campaña 2013/2014 y los seis del curso anterior. Gracias por convertir la confianza de Ziganda en magia sobre el terreno de juego. En definitiva, gracias por brillar y hacer soñar.
Muchas gracias y hasta siempre, Jon Iru. Desde la temporada 2013/2014 luchando, y de qué manera. Al final, 38 encuentros que han dejado a un bilbaíno preparado para liderar el centro del campo. Gracias por hacerte más fuerte en las mejores divisiones y por aceptar que en el fútbol mandan las decisiones de los entrenadores. Gracias por haber elegido el Bilbao Athletic.
Jon Ander alternó titularidad en Segunda División con Remiro
Muchas gracias y hasta siempre, Jon Ander Felipe. Gracias por esa constancia en el trabajo que ha derivado en un ascenso de categorías fugaz. Gracias por tener referentes vestidos de rojo y blanco y gracias por luchar por unos sueños que no hacen más que crecer con estas decisiones. Aunque, si hay algo que agradecer, es la disposición a no crear conflictos. Cuando todo parecía enturbiarse en Segunda División, cuando el problema parecía estar centrado en la portería del Bilbao Athletic, llegaron diez oportunidades en las que demostrar la preparación adquirida. Gracias por hacer grupo y por apoyar a los compañeros.
Muchas gracias, Jon Ander Amelibia. Aunque desconocido para gran parte de la afición, un central tan polivalente y joven no puede quedar en el olvido. No puede parar de recibir agradecimientos. Porque estar cedido nunca es fácil aunque en ocasiones es lo más conveniente. La SD Amorebieta ha formado un gran defensor que ahora está más que capacitado para dar el salto al fútbol de élite. Suerte allá donde vayas y hasta siempre.
El Athletic Club aún tiene otra opción para repescar a Erik Morán
Finalmente, muchas gracias y ¿hasta pronto, Erik Morán? Posiblemente sí. Probablemente no. De momento, otro año más en el Zaragoza. El Athletic Club no ha ejercido la opción de repesca, pero qué más da, aún queda otra y, además, la parroquia bilbaína ya sabe del gran centrocampista nacido en Portugalete. De ese mediocentro que está a escasos kilómetros formándose para dar el salto definitivo. Acumulando la experiencia que más tarde habrá que agradecer. Como hay que hacerlo por el debut en UEFA Europa League ante el Hapoel. Como hay que hacerlo por estar dispuesto hasta en los momentos más complicados de la vida. Gracias Erik Morán.
En definitiva, gracias por todo. Todo lo bueno de cada uno quedará por siempre en esta institución humilde como pocas. En la retina de aficionados vestidos de rojiblanco que orgullosos podrán decir en un futuro: “Este jugador pasó por el Athletic”. Gracias por haber sido héroes de unos niños que sueñan de pasar de darle patadas a un balón en un parque cualquiera a marcar su primer gol en San Mamés. Muchas gracias y hasta siempre.