Pape Maly Diamanka y Álex Quintanilla son desde este viernes nuevos jugadores de la Unión Deportiva Almería. El senegalés ha llegado a un acuerdo para rescindir el contrato que le unía al Real Zaragoza y que tenía una vigencia de dos temporadas más. Por su parte, el nuevo central rojiblanco llega desde el Barakaldo, con el que disputó el playoff de ascenso a Segunda. Ambos firman para las dos próximas campañas.
Nacido en Dakar hace 26 años, Diamanka comenzó su andadura futbolística en el US Goree de la Superleague de Senegal. Desde allí dio el salto a Europa, concretamente al Rayo Vallecano, que lo reclutó para su filial en 2010. La temporada siguiente tuvo la oportunidad de debutar en Primera División de la mano de José Ramón Sandoval portando la zamarra rayista; en total completó siete encuentros en la élite antes de irse cedido al Valerenga noruego en el curso siguiente, pero una lesión en el aductor frenó su progresión.
Volvió a Vallecas para permanecer una temporada más en el barrio del sur de Madrid y de ahí se fue cedido al Sestao River de Segunda B, donde cuajó su mejor temporada hasta entonces. Actuación que le valió para llamar la atención del Club Deportivo Leganés, recién ascendido a Segunda División y con el que intervino en 28 encuentros y anotó un único gol. En la recién concluida campaña defendió la camiseta del Real Zaragoza, que le contrató por tres temporadas, siendo pieza importante en los esquemas de Ranko Popovic, pero tras la destitución del técnico serbio, su participación fue a menos con Lluis Carreras en el banquillo.
La nueva incorporación rojiblanca para la medular no es un centrocampista defensivo al uso, dado que comenzó su carrera actuando como mediapunta y retrasando de forma paulatina su posición hasta asentarse en el doble pivote. Puede aportar músculo y contención a la medular, pero también salida de balón y llegada al área rival. De ahí que pueda complementarse mejor con otro jugador que sea capaz de realizar el “trabajo sucio”.
Por su parte, Álex Quintanilla, nacido en Bilbao hace 26 años, se desenvuelve en el centro de la zaga, aunque dada su polivalencia puede actuar en el doble pivote. Empezó su trayectoria futbolística en Lezama, llegando a jugar con el Bilbao Athletic. Tras esto, firmó por el Alavés y, después, por el Valencia para finalmente enrolarse en las filas del Barakaldo.
Fue con el conjunto vasco con el que cuajó su mejor temporada, siendo un central destacado en la categoría y disputando los playoffs de ascenso a Segunda, de los que fue apeado por el Lleida.
De esta manera, Diamanka llega con la inteción de conseguir la estabilidad que anteriormente no obtuvo. En el caso del zaguero, busca asentarse en el fútbol profesional. Ambos podrían llegar a Almería en las próximas horas e incorporarse a la disciplina rojiblanca a partir de la semana que viene.