Día muy esperado para toda la afición granadinista, el del estreno del nuevo Granada CF en la temporada 2016/17. El proyecto de Jiang Lizhang, con un equipo comandado por Paco Jémez, se presentaba en el estadio Nuevo Los Cármenes para disputar su primer partido liguero con la visita del Villarreal CF. El feudo granadinista, más rojiblanco que la temporada anterior -pues esos colores lucían incluso en la mayoría de paneles publicitarios-, se preparó para la primera cita liguera que finalizó con un empate a uno que dejó buenas sensaciones entre la afición granadinista, que vio cómo su equipo mejoró con el paso de los minutos y que uno de los protagonistas fue Jérémie Boga, quien llevó el peso del juego de los rojiblancos.
Para este primer encuentro, Paco Jémez no citó a varios fichajes de esta temporada, concretamente a los defensas Matthieu Saunier y Gabriel Silva y al delantero José Angulo. Así , los primeros once elegidos por Jémez fueron Ochoa, Tito, Uche, Lombán, Foulquier, Krhin, Javi Márquez, Boga, Jon Toral, Cuenca y Ezequiel Ponce. El Villarreal, por su parte, llegó con bajas importantes como Soldado, Bakambu, Jonathan Dos Santos, Cheryshev, Jaume Costa y Bonera, y en mitad de su eliminatoria de clasificación para la próxima Champions.
El encuentro arrancó sin dominio por parte de ninguno de los dos equipos, aunque sí con intensidad, pese a la alta temperatura que hacía en la ciudad granadina. El equipo de Jémez quería agradar a su afición y, poco a poco, empezó a acercarse al área de Asenjo. Isaac Cuenca, uno de los más destacados en el tramo final de la campaña pasada, fue uno de los protagonistas de la primera ocasión de peligro del Granada CF. El catalán centró para Ezequiel Ponce, quien cayó en el área y pidió penalti. No señaló nada Estrada Fernández.
El Granada pasó luego apuros en una jugada a la contra en la que Guillermo Ochoa estuvo atento para salir de su área y despejar un balón que ya controlaba Pato tras zafarse de Lombán. La jugada se inició tras una pérdida de Javi Márquez. Pero más peligro llevó un disparo de Bruno Soriano que repelió a córner, de manera providencial, Uche Agbo, sacando su pierna en el momento oportuno.
Sansone vio la amarilla minutos más tarde por simular un penalti (27') antes de que el partido cayera en una fase de imprecisiones constantes en el centro del campo, especialmente por parte del Granada CF. Lo único más reseñable de la primera mitad fue una internada por la banda derecha de Foulquier, cuyo centro despejó a córner Víctor Ruiz.
Ocasiones, palos y goles
La segunda mitad se inició sin sustituciones pero el partido sí cambió, pues empezaron a producirse más oportunidades para animar un poco el encuentro. El Villarreal tuvo en la frontal del área una falta muy peligrosa a su favor, pero el lanzamiento ejecutado por Pato se marchó alto. Desperdició el ´submarino amarillo' esta y otra ocasión después, cuando Soriano estrelló en el palo un potente disparo. Eso solo fue un aviso de lo que estaba por llegar.
En el 60', Uche cometió falta en la frontal. El balón se situaba en la misma posición que minutos antes pero, esta vez, Samu Castillejo armó bien su pierna para disparar el balón y alojarlo por la escuadra de la portería defendida por Ochoa. El malagueño ponía el 0-1 y silenciaba a Los Cármenes (61').
Duró poco porque la afición granadinista enseguida comenzó a alentar a su equipo y este le respondió como debe. Con un gol que puso el empate tan solo tres minutos después. Ezequiel Ponce se estrenó como goleador en Primera tras rematar en el área un buen balón centrado por Jon Toral. El catalán había recibido un balón sacado en corto desde el córner por Isaac Cuenca. Una jugada ensayada que terminó a la perfección.
El Granada CF intentó buscar el tanto que le diera la vuelta al resultado. Jémez decidió dar descanso a Márquez - que fue capitán- e introdujo a David Barral en el césped. El gaditano actuó como mediapunta, por detrás del rosarino Ponce. Pero el Villarreal intentó frenar las 'embestidas' granadinas y asustó con un disparo de Sansone al palo, por segunda vez. La aproximación más peligrosa del Granada fue de Ponce, con un disparo fuera tras un centro de Barral.
Jon Toral salió para dejar su sitio a Luis Martins, de regreso en Granada. También Escribá movió su banquillo: puso en liza a Santos Borre en lugar de un desacertado Sansone. En ese tramo final fue el Granada CF el que más apretó y tuvo ocasiones para perforar la meta contraria con jugadas que inició Boga. El centrocampista pasó a actuar por el centro y a dejar muchos detalles de su calidad y visión de juego. También Luis Martins puso un gran centro al área que no encontró rematador en la que fue una de las últimas ocasiones claras del partido.
El Granada CF dejó un buen sabor a su afición en su primera cita liguera. Un equipo que aún está en construcción pero que quiere empezar a poner buenos cimientos para una temporada que se espera ilusionante.