El fútbol regresaba al Santiago Bernabéu tras el parón de selecciones. La afición blanca tenía marcado en el calendario este sábado, ávida de poder disfrutar tres meses después de su héroe, Cristiano Ronaldo. El 'crack' portugués volvía a vestir la zamarra blanca dos meses después de  proclamarse Campeón de Europa con Portugal y lesionarse. 

El Real Madrid ya sonríe

Poco tardaba Ronaldo en demostrar que no se le ha olvidado hacer goles, ya que tan solo seis minutos ante Osasuna le bastaban para abrir su cuenta goleadora en la presente campaña. Bale acunaba un buen pase de Danilo, conducía por la banda, se internaba en el área y asistía al luso para que, sin oposición, abriese el marcador en la primera ocasión del encuentro. Bale asiste y Cristiano rompe la hucha de golesPoco necesitaba el conjunto blanco para desmontar la defensa de cinco de Osasuna y aumentar su cuenta. Kroos tuvo en sus botas la oportunidad de anotar el 2-0 tras una estampida de corceles blancos. Cristiano conducía, Morata centraba y el alemán mandaba al lateral un rechace del meta Nauzet.

Osasuna, futbolísticamente inferior a los blancos, buscaba empatar la contienda con un juego directo, ordenado y de presión. Los 'rojillos' buscaban el empate desde la esquina, pero la defensa madridista achicaba las ocasiones con solvencia. Precisamente desde uno de los vértices iba a llegar una clara ocasión para los merengues, pues Bale cabeceó demasiado cruzado en el primer palo un centro de Kroos. La 'BMC' engranaba a la perfección ya que el córner había llegado tras un golpeo de Morata desde fuera del área. Poco le hacía falta al conjunto de Zidane para crear peligro; un balón en largo de Modric sobre el espacio de Cristiano y vaselina del luso ante la salida de Nauzet, se marchaba alto.

Unai García despierta a los blancos de la siesta

El conjunto blanco se veía muy superior al navarro, y lejos de machacar al rival, buscaba el gol cincelando una obra de arte. Las bandas de Bale y Cristiano generaban muchas ocasiones pero estos no afinaban en el último pase y la definición. Así, el plantel de Kike Martín comía terreno a su rival con sutileza y aplomo, tanto que a punto estuvo de lograr la igualada con un cabezazo de Unai García; la diosa Fortuna y el larguero quisieron que la ocasión no fuese a mayores.

Pulsó el despertador blanco Osasuna, ya que el Madrid iba a lanzar un contragolpe para poner tierra de por medio. Cristiano centraba desde la izquierda y Danilo aprovechaba el rechace de Nauzet para, con un disparo cruzado, batir al meta 'rojillo'. Instantes después iba a gozar Bale de una nueva ocasión, esta vez con asistencia desde la banda de Morata (excelso el canterano todo el encuentro); el galés controló y picó el cuero por encima de Nazuet, quien le derribó dentro del área. Fernández Borbalán no vio nada punible. Bale dispuso de tres ocasiones claras de gol, pero se marchó de vacíoSe cumplían los primeros 45 minutos con el 2-0 campeando en el marcador. Sin embargo, un remate de Sergio Ramos a saque de esquina ponía el 3-0, ahogando cualquier esperanza navarra de remontada, refractando un panorama poco halagüeño para el segundo tiempo.

Fiesta de goles en el segundo tiempo

El Real Madrid se gustaba ante su público, manoseando y compartiendo el cuero en un encuentro para el espectáculo y el lucimiento. Pepe aumentaba la ventaja al poco de la reanudación con un remate de cabeza en un nuevo saque de esquina. Nauzet puso de su parte poniendo las manos blandas y transparentes. El equipo de Zidane continuaba asediando la meta de Nauzet penetrando por las bandas. El centro de Cristiano brindaba una nueva oportunidad a Bale, quien a pesar de gozar de innumerables ocasiones se iba a marchar de vacío. Controló nuevamente el galés, pero Nauzet estuvo rápido esta vez, echándosele encima. El equipo merengue iba a calcar la jugada, pero esta vez con final feliz. Modric recogía un rechace en la frontal del área y disparaba con maestría, colocado, ante la mirada impasible de Nauzet.

Modric, la esencia blanca

El centrocampista croata se retiraba del campo ovacionado, a renglón seguido de su tanto y con el partido teóricamente resuelto, reemplazado por la ilusión y el talento del joven Asensio. El ya internacional español puso la magia en el segundo periodo, pero la pelota se deshinchó en el pie merengue. Miguel de las Cuevas puso el centro desde la derecha y el recién incorporado Oriol Riera la cabeza, cruzando un potente remate ante la impotente estirada de Kiko Casilla. Cuestión de potencia.Sin Modric, Osasuna doblega al Madrid y muestra sus carencias. La defensa merengue, que había errado en el primer periodo en una ocasión, concedía otra oportunidad a los navarros de recortar distancias. El osasunista Jaime robaba el esférico a Nacho en el vértice del área y se internaba. Ramos le derribó en un intento desesperado de desbaratar la ocasión y el juez de la contienda señaló el punto fatídico. Kiko Casilla detuvo la pena máxima ejecutada por Roberto Torres, levantando los aplausos del respetable que se confundían con algunos pitos, fruto del letargo y consecuente mal juego merengue.

Benzema, negado a puerta

La tarde era de regresos, y aunque la BBC no coincidió sobre el césped, el delantero galo volvía a disputar un encuentro tras superar por completo su lesión. Karim iba a gozar de una gran oportunidad tras una internada por la banda derecha de Lucas Vázquez, quien había suplido al desacertado Expreso de Cardiff. El '9' blanco reculó para rematar un pase atrás, pero su disparo se estrelló en el travesaño de Osasuna.David García desnuda las carencias blancas y levanta los primeros pitos de la temporada No tuvieron mucha suerte los delanteros blancos, ya que ni Morata ni Benzema consiguieron marcar a pesar de una buena actuación. Todo lo contrario que Osasuna, que veía cómo un remate de David García al segundo palo, casi sin ángulo y sin apenas convicción, superaba a Kiko Casilla y se introducía en la meta blanca. Oscuro final para un encuentro que el Real Madrid había dominado de principio a fin. 

Los pitos de la grada espolearon al plantel merengue, que veía cómo menguaba su diferencia y, ante todo, su imagen. Asensio buscaba el pase entre líneas, pero sin demasiada finura en el último toque. Lucas Vázquez se convirtió en un puñal por la banda derecha poniendo un nuevo centro sobre Benzema, que erró un nuevo palo cuando se cumplía el tiempo reglamentario. Tres puntos más para el Real Madrid, que se coloca líder provisional de la clasificación en la vuelta de la bestia.