Andrés Iniesta cumplió ayer en Vigo su partido número 600 como jugador del FC Barcelona. Un partido que no quedará precisamente en un grato recuerdo para el manchego tras la derrota del equipo azulgrana frente al Celta de Vigo (4-3). El equipo azulgrana se vio superado en todo momento por la presión local y en una concatenación de errores, sumados al buen hacer de los celtiñas, amargó la noche en la que el equipo culé pudo ponerse como líder en solitario tras el pinchazo del Real Madrid en Liga ante el Eibar (1-1).

Iniesta saltó al terreno de juego en la segunda mitad, con un marcador contrario de 3-0 para los hombres de Berizzo, que en tan sólo media hora de partido ya habían prácticamente sentenciado el choque. Una situación que, tras no conseguir remontar el conjunto azulgrana, ha provocado que Andrés Iniesta no guarde un gran recuerdo de estos 600 partidos como culé, cifra a la que llegan solo  las grandes leyendas de la entidad como es el caso de Xavi Hernández, que suma 767 partidos y todavía se mantiene como el jugador culé con más partidos con la casaca blaugrana.

Ya en el recuerdo queda aquel 29 de octubre de 2002, cuando el manchego hizo su debut oficial. Fue Louis van Gaal quien le dio la alternativa en aquel momento y desde entonces Iniesta ha ido sumando partidos y mejorando su posición en la plantilla, creciendo como jugador has convertirse en la estrella mundial que ahora representa. Desde aquella fecha han transcurrido 13 años, 11 meses y 1 día. En total 5.085 días como barcelonista, más si contamos su llegada a La Masia, en los que han sumado 406 victorias y 29 títulos, además de un sinfín de logros personales y colectivos que le encumbran a la cima de la historia del fútbol.